Durante la última serie de los Diamondbacks en San Francisco, el receptor de Arizona, el venezolano Miguel Montero, se sentó solo en el dugout y observó las prácticas de bateo de los Gigantes.
El objetivo no era matar el tiempo ni solearse.
«Me gusta analizar los swings (de la oposición)», dijo Montero. «Eso podría ayudarnos durante el juego.»
Montero toma tan en serio la responsabilidad de pedir el juego que trata de adquirir cualquier conocimiento sobre el equipo contrario.
«Lo hago más con los jugadores que no he visto mucho anteriormente», dijo Montero. «Ya tenemos un plan para los que hemos visto mucho. Con los otros, me gusta ver cómo son sus swings para saber cómo podremos retirarlos.»