Las autoridades electorales iniciaron el lunes el proceso de auditoría complementaria de las elecciones del 14 de abril sin la presencia de la oposición, que rechazó participar en la revisión alegando que no fueron incluidos todos los elementos del proceso.
El Consejo Nacional Electoral comenzó la auditoría de 46% de las mesas de votación que no fueron incluidas en la revisión ciudadana que se realizó el 14 de abril, según confirmó a la AP una vocera de la institución que pidió no mencionar su nombre porque no está autorizada para declarar.
Por la ley venezolana en cada proceso electoral se debe auditar 54% de las cajas electorales. La revisión de 46% de las mesas fue acordada el mes pasado por las autoridades electorales tras presiones de la oposición que objetó los resultados y desconoció la victoria del oficialista Nicolás Maduro alegando que en la consulta se cometieron presuntas irregularidades.
Tal lo acordado por las autoridades, la auditoría se realizará sobre una «muestra aleatoria de 46% de las mesas que no fueron auditadas el domingo 14 de abril», según señala el documento de los parámetros de verificación que fue difundido por el CNE en su página de internet.
«Se hará una auditoría durante 10 días continuos al término de los cuales se deberá hacer un informe. Se repetirá la operación hasta llegar al mes», agrega el escrito.
La auditoría se inició el lunes de forma privada con presencia de técnicos del Partido Socialista Unido de Venezuela, según indicó la vocera del CNE. La oposición no participó en el proceso alegando que la revisión era una «farsa» porque no incluyó todos los elementos de la consulta tales como boletas, actas y cuadernos de votación.
Tras negarse a acudir a la auditoría, el ex candidato presidencial opositor Henrique Capriles impugnó la semana pasada ante Tribunal Supremo de Justicia todo el proceso de votación por supuestos «vicios», y exigió la repetición de las elecciones.
«Estamos pidiendo que nos permitan auditar los cuadernos (padrones electorales)… Cuando aquí se permita hacer la auditoría de los cuadernos el mundo va hacer realmente que el presidente electo es Henrique Capriles», afirmó el lunes el alcalde opositor de la región capital, Antonio Ledezma, al objetar el proceso de auditoría iniciado por el CNE.
Ledezma dijo a la prensa que la revisión de los cuadernos de votación y su comparación con las boletas y actas de sufragio permitirían revisar «miles de incidencias» que detectaron los testigos de la oposición en las mesas de votación tales como «doble voto» y la presencia de «fallecidos (que) los pusieron a votar».
Maduro, de 50 años, logró la victoria en las elecciones presidenciales del 14 de abril con 7,5 millones de votos, superando por un estrecho margen de 224.739 sufragios a Capriles. La ajustada diferencia generó cuestionamientos de la oposición.
oberto Abdul, presidente del comité directivo de la ONG local Súmate dedicada a la defensa de los derechos políticos, afirmó que la auditoría iniciada este lunes por el CNE no resuelve las dudas que hay en torno a la consulta, ni alivia las tensiones que imperan en el país desde hace tres semanas, porque el proceso «no es público… (y) no responde a lo que técnicamente sería necesario para poder digamos hacer un diagnóstico».
Abdul dijo a la AP, en entrevista telefónica, que con esta auditoría limitada el CNE lo que está haciendo es «lavarse la cara», pero no resuelve las dudas que hay sobre el proceso.
Luego de las elecciones presidenciales se registraron protestas callejeras en Caracas y otras ciudades del interior del país. El gobierno y las autoridades judiciales sostienen que durante esos días fallecieron 9 personas y 78 resultaron heridas.
La crisis política que enfrenta Venezuela desde mediados de abril tuvo una nueva escalada el pasado martes con la trifulca que protagonizaron diputados oficialistas y opositores en pleno hemiciclo de la Asamblea Nacional, donde varios congresistas resultaron lesionados.
La oposición difundió la semana pasada varios vídeos en los que se ven a congresistas oficialistas dándole puñetazos a sus pares opositores, algunos de los cuales cayeron al suelo, y luego se ve como algunos parlamentarios de ambos bandos trataron de mediar para calmar los ánimos.
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