Pep Guardiola, próximo entrenador del Bayern Munich, descartó el jueves volver a dirigir al Barcelona español, club del que se alejó cargado de gloria.
Guardiola, quien habló en la capital argentina tras llegar ese mismo día para dar una conferencia sobre liderazgo en un teatro, dijo que hay que mirar hacia el futuro y enfrentar otros retos.
“Creo que es una etapa cerrada. Fue una etapa fantástica de mi vida pero se acabó», contestó Guardiola cuando se le preguntó si volvería como técnico del equipo blaugrana, en cuyo paso de 2008 a junio de 2012 ganó, entre otras cosas, los seis títulos a los que aspiraba el equipo (la Copa del Rey, el título de liga, la Liga de Campeones de la UEFA, la Supercopa de España, la Supercopa de Europa y el Mundial de clubes).
Guardiola destacó que esos éxitos fueron posibles gracias a la humildad de sus jugadores, entre ellos el número uno del mundo, el argentino Lionel Messi, a quien elogió.
“Hubiera sido imposible (sus éxitos) si no hubiera tenido la gran fortuna de haber encontrado unos jugadores que hicieron de su oficio, de su profesión, una cosa muy, muy amateur», destacó el técnico en una charla que brindó a alumnos de escuelas públicas de la ciudad de Buenos Aires y que difundieron varios medios, entre ellos el canal TodoNoticias. «Han sido los amateurs más profesionales que he conocido».
Guardiola no respondió a ninguna de las preguntas relacionadas con el Bayern, el club que precisamente eliminó el miércoles al Barcelona en semifinales de la Liga de Campeones por un resultado global de 7-0 (4-0 y 3-0).
Sobre su alejamiento del Barcelona aseguró que se fue con mucha paz.
“Sentí una tranquilidad muy grande conmigo mismo; había hecho lo mejor que pude. Todo tiene un inicio y un final; el final llega cuando descubres que es suficiente», afirmó.