REFLEXION
Dedicado al Club Corredores del Oeste en su 2da Milla Urbana
¿Qué hace que un grupo de personas planifiquen y ejecuten una acción para asesinar a corredores inocentes que sólo hacen deporte? ¿Quién concibe que un atentado criminal vaya dirigido a una competencia deportiva, donde solo se manifiesta un esfuerzo personal en beneficio de la salud? ¿Cómo alguien es capaz de cometer un crimen tan horrendo y absurdo en una carrera como el Maratón de Boston?.
Tal vez, algún “analista”, a la luz de su propia conclusión, justifique lo injustificable. Como por ejemplo, el atentado perpetrado en las Olimpiadas de Múnich en 1972. Donde el grupo palestino SEPTIEMBRE NEGRO, enemigo de Israel, en “defensa de su soberanía”, actuó y murieron once atletas y entrenadores israelíes. O la voladura del avión de Cubana de Aviación, en octubre de 1976. Justificado por algún criminal, por cuanto era la forma de golpear el gobierno castro comunista de la isla, donde perdió la vida todo el equipo cubano de esgrima que regresaba de un torneo en Venezuela, 11 jóvenes guyaneses que iban a Cuba para estudiar Medicina y cinco técnicos coreanos. Dos hechos aborrecibles y condenables de manera absoluta.
Igualmente, conocemos otros tristes y absurdos atentados que se han producido en el mundo del deporte. Donde cualquier diatriba política, racial o religiosa ha sido esgrimida para justificarlas. Tal es el caso de los Juegos Olímpicos de Atlanta el 27 de julio de 1996 en el Parque Olímpico del Centenario, con dos muertos y 110 heridos. O el de Mayo del 2002, cuando ETA hizo estallar dos coches bomba en las inmediaciones del Estadio Santiago Bernabéu en Madrid donde hubo 17 heridos. El atentado se produjo cuatro horas antes de disputarse la semifinal de Champions League entre Real Madrid y Barcelona. O el de Irak, en Mayo del 2006, donde quince seleccionados y dirigentes del equipo nacional de taekwondo fueron secuestrados y no se ha vuelto a saber de ellos. O el espeluznante de Enero del 2010, cuando un suicida, con bomba en un vehículo, explosionó en un sitio donde se jugaba un partido de voleibol en el noroeste de Pakistán y murieron 70 personas.
Pero un atentado como el que se llevó cabo en el Maratón de Boston recientemente nos tiene consternado. Por lo cual nos ubica exactamente en lo que Dios ha profetizado, que el tiempo del fin de este miserable planeta está más cerca. “Esto ten en cuenta, que en los últimos días vendrán tiempos peligrosos.”2Tim.3:1. Y sigue diciendo entre otras cosas. “Habrá hombres amantes de sí mismos, … soberbios, blasfemos, …sin afecto natural, … crueles …” Vers.2-4. ¿Es mentira eso? Entonces, es propicia la ocasión para seguir en un plano reflexivo, que nos acerque más al Evangelio Eterno de nuestro DIOS. Por cuanto estamos absolutamente convencidos, que estos lamentables actos seguirán sucediendo. Por ello, es necesario estar preparados, esperanzados en la promesa de la gloriosa venida de nuestro Señor Jesucristo. Y así, poder vivir firmemente con tranquilidad.
Quienes escudriñamos las Sagradas Escrituras. Estudiando los textos en su debido contexto. Profundizando en la exégesis de las palabras. Un poquito aquí y un poquito allá. Sabemos, que podemos ser víctimas de la violencia. Y realmente, como humanos que somos, nos angustia y asusta esta realidad. Pero honrando a Dios (y la honra se fundamenta en la obediencia a su palabra) podemos ser librados del mal en cualquier momento. Con los jóvenes hebreos cautivos del rey Nabucodonosor, quienes honraban verdaderamente a Dios, se comprueba. “Sadrac, Mesac y Abednego respondieron al rey Nabucodonosor: … «Nuestro Dios a quien honramos, puede librarnos del horno de fuego. Y de tu mano, oh rey, nos librará.”Dan.3:16,17. Es cuestión de creer y hacer nuestras sus promesas, como lo hizo el apóstol Pablo, cuando le habló a los hermanos de Galacia y a nosotros hoy. “Gracia y paz a vosotros, de nuestro Padre Dios, y del Señor Jesucristo, que se dio a sí mismo por nuestros pecados para librarnos de este presente siglo malo, conforme a la voluntad de nuestro Dios y Padre”Gal.1:3,4.
El Maratón o la carrera, evento deportivo que de manera exitosa organiza el Club de Corredores del Oeste, por sus características tan especiales, fue usada por Pablo, para graficar la vida del cristiano. Por ello me apasiona y la practico. Acosado por el enemigo, por predicar de Jesús, decía. «Pero ninguna de estas cosas temo, ni estimo mi vida preciosa para mí mismo; con tal que acabe con gozo mi carrera, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, de dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.” Hech.20:24. ¿Qué les parece?. !Ejemplo a seguir!. !Hasta el martes Dios mediante! “Cuanto más cavamos en las Escrituras, más nos parecen una mina inagotable de verdad” Charles Spurgeon.