El Club Deportivo Lara tuvo reacción inmediata ante un gol encajado a principios de la etapa de complemento e intentó darle vuelta a la pizarra en el resto del partido, pero su esfuerzo no fue suficiente, por más que en algunos momentos impuso condiciones, y terminó con un agridulce empate 1-1 frente al Deportivo Anzoátegui, que se consigue en condición de visitante -el estadio José Antonio Anzoátegui de Puerto La Cruz- pero trunca el objetivo de colocarse a tiro del liderato en el torneo Clausura.
Tras un primer tiempo de dominio alterno y sin mayores ocasiones de gol, la pizarra de movió en el comienzo del complemento, cuando el panameño Rolando Escobar -jugador que años atrás estuvo en la escuadra larense- adelantó a los anzoatiguenses con un disparo desde fuera del área, al minuto 46, y José “Buda” Torrealba ripostó al 50, al capitalizar un rebote dentro del área.
La tropa de Lenín Bastidas podía amanecer a dos puntos del liderato, pero en cambio se mantuvo quinto con una cosecha de 23 puntos. Anzoátegui, en contraparte, se convirtió en el nuevo líder, aunque con una diferencia muy corta sobre los equipos que le siguen: Zamora (27), Trujillanos (26) y Mineros (24).
Con tres jornadas por disputar, la pelea por el título sigue abierta, aunque el cuadro larense es el que más difícil lo tiene, más allá de que le queda un partido pendiente, que jugará contra Petare dentro de una semana.
En el otro frente -la batalla por el tercer lugar de la tabla acumulada, que da acceso a la ronda previa de la Copa Libertadores 2014- el cuadro larense tiene una empresa menos complicada, porque está a sólo un punto del Caracas, que empató ayer con Llaneros en otro partido reprogramado.
La oncena larense sufrió un golpe en su planificación pocas horas antes del desafío, toda vez que el atacante colombiano Zamir Valoyes debió abandonar la concentración y regresar a Barquisimeto por problemas familiares.
Una baja muy sensible y que llevó al técnico a colocar una formación inesperada, con Kenny Romero como un falso segundo delantero y que tenía la misión de asociarse con Jesús Gómez y Marlon Fernández en la zona de creación, mientras que José “Buda” Torrealba era el único delantero.
Trató de tener el balón y llegar con claridad al arco de Anzoátegui, pero la defensa de este último equipo estuvo muy bien parada, con mucho orden, y anuló la mayoría de los intentos, lo que llevó a que la primera parte terminara como empezó: sin goles en el marcador.
La emoción llegó con el reinicio. Primero el gol de Escobar y la rápida respuesta de Torrealba, que le daba alas a los crepusculares en el intento de buscar los tres puntos.
Quedaba mucho tiempo, pero faltó más claridad. Entró Aquiles Ocanto para acompañar a Torrealba y Joel Cáceres se situó en el lateral, todo con la intención de tener más profundidad en ataque, pero no fue suficiente.
Al final, un agridulce empate. Toca ahora prepararse para el duelo del domingo contra Monagas, en el que es una obligación ganar para conservar intactas las posibilidades matemáticas.
