El profuso acervo musical venezolano debe al compositor Antonio Lauro gran parte de su riqueza, así como su reconocimiento mundial.
Este multidisciplinario músico, nacido el 3 de agosto de 1917 en Ciudad Bolívar, murió hace 27 años en Caracas. Específicamente, el 18 de abril de 1986.
A propósito, el profesor Luis Enrique Silva Ceballos, quien compiló la trayectoria de Lauro y para más señas lo entrevistó, consideró oportuna la fecha para recordar el legado de uno de los máximos compositores para guitarra del país. “Su padre fue quien lo acercó a la música. Era un barbero italiano que llegó a Ciudad Bolívar, emigrando de las guerras de Europa. Vio en Lauro desde pequeño, inclinación hacia la música”.
Posteriormente, a los 8 años, fue alumno del director de la banda de la ciudad.
“Cuando su padre muere, Lauro se traslada a Caracas con su familia. Esto ocurre aproximadamente en 1929”.
Silva Ceballos apuntó que entre 1931 y 1932 Lauro ejerció diferentes oficios.
“En una entrevista me contó que tocó en la Broadcasting Caracas. El maestro tocaba la guitarra, cantaba, hacía los arreglos de música popular y acompañaba a los cantantes aficionados”.
Formación
Lauro, entre 1930 y 1940, continuó sus estudios en la Escuela de Música y Declamación, donde estudió Teoría y Solfeo, Armonía, Contrapunto y Composición con Vicente Emilio Sojo, piano con Salvador Llamozas, guitarra con Raúl Borges e Historia y Estética de la música con Juan Bautista Plaza.
“En la década de los 30, Lauro escuchó por radio al gran guitarrista y compositor paraguayo Agustín Pío Barrios, mejor conocido como el Indio Mangoré. Lauro me contó que él quería ser pianista, pero después de oír a Pío Barrios, cambia el piano por la guitarra”.
El investigador acotó que Pío Barrios le dio clases a Raúl Borges, maestro de Antonio Lauro, Alirio Díaz, Rodrigo Riera, Manuel Enrique Pérez Díaz, entre muchos otros.
“Tengo la hipótesis de que los guitarristas venezolanos adoptaron la técnica de Mangoré porque él le dio numerosos consejos a Borges, quien formó seis generaciones de guitarristas. Por ello, Venezuela es considerada en el mundo, uno de los países con mayor cúmulo de guitarristas compositores”.
Lauro se graduó con los más altos honores en 1947.
“El gran guitarrista australiano-inglés John Williams llamó al maestro Lauro el ‘Strauss de la Guitarra’, por ser uno de los primeros compositores en el mundo de una colección de valses de conciertos especialmente para la guitarra académica. En Europa se le considera con ese título”.
Johann Strauss fue un compositor austriaco conocido especialmente por sus valses, como Danubio azul.
Grupo musical
En 1935, por iniciativa de la compositora venezolana María Luisa Escobar, presidenta fundadora del Ateneo de Caracas, el maestro Antonio Lauro funda el grupo vocal-instrumental Los cantores del trópico junto a Manuel Enrique Pérez Díaz, Marco Tulio Maristany y Eduardo Serrano.
Este grupo no sólo se presentó en Venezuela, sino que hizo una larga gira por Latinoamérica. Grabaron seis discos y obtuvieron grandes elogios.
Lauro, dijo el entrevistado, se preocupó, junto con Antonio Estévez, por la creación de grupos corales en escuelas y liceos de la Caracas de la época. Uno de ellos, el de la Escuela Normal para Mujeres Gran Colombia.
Preso durante la dictadura
El maestro era de ideas democráticas y fue uno de los presos de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez. “En 1952, estando preso, escribió dos de sus obras fundamentales, la Suite Venezolana en cuatro movimientos y su famosa Sonata en tres movimientos. Él me dijo, que como especie de concesión le permitían una que otras veces tener la guitarra… llegó a escribir sin tener el instrumento, de memoria”. Uno de sus valses más conocidos es Natalia, dedicado a su hija. “Esta obra ha tenido numerosas versiones para orquestas y grupos instrumentales”.
En su última faceta se dedicó a la docencia, formando varias generaciones de guitarristas en la Escuela Juan Manuel Olivares, Juan José Landaeta y José Ángel Lamas, además fundó el trío de guitarra Raúl Borges. Entre sus alumnos están Luis Quintero y Luis Zea, quienes hacen hoy día carrera a escala mundial. Antonio Lauro, visitó Londres, donde realizó varios conciertos auspiciados por los grandes guitarristas John Williams y John Duarte
De interés
En 1941 se trasladó a Maracaibo para trabajar en la radio Ondas del Lago donde laboró como director artístico. De ese año data su famoso valse El marabino.
Estrenó todas las obras que requerían de un bajo barítono en Venezuela, como la 9º Sinfonía de Beethoven y la famosa Cantata Criolla de Antonio Estévez.
Fue director artístico de la Orquesta Sinfónica de Venezuela y presidente de la Asociación Venezolana de Autores y Compositores.
En los últimos años de su vida realizó una gira de conciertos por todo el país, auspiciada por la Presidencia de la República de la época.
Visitó Londres, donde realizó varios conciertos auspiciados por los grandes guitarrista ingleses John Williams y John Duarte.
