La selección de Venezuela superó situaciones adversas gracias a las intervenciones providenciales del portero Beycker Velásquez y resurgió en el segundo tiempo, empujada por el desequilibrante Ronaldo Peña y el efectivo Andrés Ponce, para rescatar un valioso empate ante el poderoso Brasil y dar un paso al frente –determinante- en el propósito de alcanzar una de las cuatro plazas mundialistas en disputa durante el Suramericano sub17 que se realiza en suelo argentino.
La oncena nacional encajó un gol en el minuto 27, obra de Gabriel Boschilia, y quedó a expensas de un rival que lo atacó una y otra vez, pero aprovechó un penal para empatar al 75 –anotación de Ponche- y llevarse un resultado que tiene efectos muy positivos en el tema numérica, pero además supone una inyección de ánimo de cara a las tres fechas restantes.
Ponce fue el héroe por la anotación, pero el portero Velásquez tuvo gran responsabilidad en el resultado, porque fue protagonista de al menos dos atajadas calves, que permitieron a la oncena nacional mantener la pizarra a ley de un gol. También fue determinante el desempeño de Ronaldo Peña, de los mejores en el torneo, especialmente en la jugada del penal, cuando se lució con un autopase, solo contra el mundo, para generar la jugada que provocó la sentencia, una mano de un defensor cuando intentaba despejar.
Venezuela, que ha ido de menos a más, llegó a cuatro puntos y se mantuvo igualado con Brasil, a falta del partido que jugaba anoche Argentina con Uruguay. La albiceleste, que también ganó en la primera jornada, tomaba el liderato en solitario en caso de salir victoriosa en el clásico de la plata.
En la primera fecha del hexagonal final, la tropa del yaracuyano Rafael Dudamel se dio el lujo de someter a Paraguay, que había terminado como líder del grupo A, y en esta ocasión detuvo a Brasil, el mandamás de la llave B.
El DT había advertido que los suyos saltarían a la cancha sin complejos y así fue. Ni siquiera por enfrentar a unos de los tradicionales gigantes cambió su esquema táctico y apeló otra vez al sistema con tres defensores.
Brasil tomó el balón desde el minuto inicial y Venezuela trataba de contragolpear cuando lo recuperaba. No era muy superior el elenco amazónico, pese a la tenencia.
Se había defendido bien la Vinotinto, pero al minuto 26 llegó la jugada que desembocó en el gol brasileño, tras una pared y un disparo muy ajustado al palo izquierdo, lanzado por Boschilia.
Por momentos, Venezuela se desarmó, pero tuvo la fortuna de contar con un portero que respondió como un grande cuando fue exigido. Merecía más Brasil, en el segundo tiempo, porque dominaba y llegaba con claridad, pero acusó falta de puntería.
Entonces, Venezuela encontró aliento en una jugada. No había creado mucho, pero Peña nunca dejó de correr por una banda y generó una acción que provocó un tonto penalti de los brasileños. Gran oportunidad y Ponce no desperdició. Disparo abajo, a la derecha del portero, adivinado pero no interceptado, y gol.
Se agigantó Venezuela y fue por más. Después de estar contra las cuerdas, tomó aliento e hizo deslucir a Brasil. Pero se reguló. A fin de cuentas era un gran resultado y había que cuidarlo.
El pasaje al mundial de Emiratos Árabes está cerca. Puede consumarse de manera oficial el domingo cuando se enfrente a Perú.
