Debe haber un pacto de gobernabilidad para enfrentar la crisis política que está viviendo el país desde la noche del día de las elecciones, dice el politólogo y profesor universitario Wilfredo Páez Gallardo, creador de las redes comunales en Iribarren.
Importante es destacar que la oposición tiene un líder nacional, Henrique Capriles Radonski, quien ha demostrado tener amplia convocatoria como quedó demostrado el lunes cuando llamó a realizar un cacerolazo, que se realizó durante más de dos horas en todo el territorio nacional.
-¿Qué hacer para que se sienta el planteamiento del conteo de los votos en el cien por ciento de las mesas, tomando en consideración que la presidenta del CNE, Tibisay Lucena, ya dijo que no se procedería a la solicitud?
-Mantener la presión en la calle, para que la voluntad del pueblo sea respetada. De no lograrse la respuesta por parte del CNE, recurrir a los organismos internacionales, para recibir apoyo internacional. Venezuela es signataria de acuerdos que la comprometen a cumplir preceptos democráticos, entre los cuales está la transparencia del voto. Y considero que se debe establecer una ruta por la democracia.
-¿Qué significa esta ruta?
-Lograr que todos sectores de la sociedad venezolana suscriban un pacto de gobernabilidad.
-¿Cómo puede suscribirse tal pacto si el máximo dirigente de la disidencia, Capriles Radonski, ha dicho que el gobierno de Nicolás Maduro es ilegítimo?
-Estamos hablando de un pacto con todos los sectores de la vida nacional: económico, universitario, educativo, social y, en general, la sociedad civil para que haya democracia. Ejemplos tenemos en el mundo que nos han dado líderes como Ghandi y Nelson Mandela . por otro lado, las sociedades cuando se han organizado contra gobiernos que no oyen al pueblo han logrado cambios, como lo ha demostrado la gente de Chile que salió de la dictadura de Augusto Pinochet. Las protestas cívicas bien llevadas siempre han dado buenos resultados. Un gobierno con gente en la calle todo el tiempo es difícil que se mantenga estable y, desde luego, ya existe una gran inestabilidad.
-¿Cómo ve esta situación como ciudadano?
-Muy grave. El mismo día de las elecciones se pudo observar en todos los centros electorales el abuso de los organismos oficiales para obligar a la gente, afin o beneficiaria del gobierno, a votar por Maduro, precisamente cuando se observaba una gran desmotivación hacia ese candidato. Todos los exit pool decían a las 5 de la tarde que Capriles tenía 5 puntos de ventaja. Y aunque no había electores en muchas mesas a las 6 de la tarde, hubo una orden de Caracas de que se mantuvieran abiertas. De igual manera pasó con las auditorías, ya que transcurría el tiempo y no se realizaban e incluso, se impedía que los electores estuvieran presentes. Sin ninguna directriz, comenzaron los cacerolazos.
-¿Tardó mucho el CNE en dar el primer boletín?
-No se entiende cómo habiendo gastado tanto dinero en la tecnología, fue después de las 11 de la noche cuando se dieron a conocer los resultados. Cuando esperábamos la victoria de Capriles con más de 500 mil votos a su favor, apareció el del oficialismo ganando con más de 250 mil. Eso generó un descontento general.
No podía Lucena hablar de cifras irreversibles porque todavía no se sabía el resultado de las votaciones en el extranjero, ni tampoco que se habían denunciado más de 3.200 irregularidades, las cuales suman ahora más de seis mil incidencias.
-¿En la crisis no jugó Capriles al desconocer los resultados?
-Hizo lo que tenía que hacer: pedir el conteo de votos.
