En días pasados, las protestas que se han generado en diversas partes del estado Lara se han vuelto cada más frecuente. En tal sentido, en la ciudad de Cabudare, municipio Palavecino, personas residentes de urbanizaciones apostadas en los alrededores de la intercomunal Barquisimeto-Acarigua, a la altura de La Mora, han protagonizados sendas protestas cada vez que la Corporación Eléctrica Venezolana realiza cortes programados, afectando la calidad de vida de esos residentes.
Estas protestas, reflejan el malestar de los habitantes y la resistencia a acostumbrarse a dicha realidad, además de exigir menor recurrencia en las acciones de racionamiento.
El pasado martes, luego de organizar un ‘cacerolazo’, vecinos de Villa Roca II, acordaron trancar la vía de forma parcial al día siguiente si, de nuevo, volvían a realizar cortes programados: acción que se llevó a cabo como estuvo estipulada. Después de cerrar la vía, a la protesta se acercaron un total de 12 personas para tratar de acabar con la acción, “se veía cuando se tapaban las franelas blancas de Lácteos Los Andes con franelas rojas”, dijo Alida Visbal, una de las residentes que protestó ese día. “Ellos (trabajadores) nos dijeron que si no quitábamos los cauchos nos pasarían las gandolas por encima. Le comunicamos nuestro derecho a protestar, pero nos replegamos a nuestras casas y ellos despejaron la vía”, explicó Visbal.
Al día siguiente, y tras un nuevo corte, vecinos de los tres conjuntos residenciales de Villa Roca, salieron a protestar nuevamente trancando la vía. En esta oportunidad, un grupo que no pudo ser identificado, cerró la intercomunal en dirección Acarigua-Barquisimeto, lo que produjo una acción similar de transportistas responsables de gandolas de Pdvsa, “quienes nos amenazaron con palos y supuestas pistolas para que levantáramos la protesta”.
A esta acción se sumaron algunos trabajadores de Lácteos Los Andes, quienes indicaron que no permitirían que se dañaran los productos por el cierre, “cuando ya estábamos por levantar la protesta por temor a ser agredidos, los agresores nos lanzaron palazos y le pegaron a un joven de las residencias por la espalda, provocando que todos corriéramos hasta el interior de la urbanización.
Al mismo tiempo, personas que viven en la urbanización de la Misión Vivienda (frente a Villa Roca I) salieron de sus casas y nos lanzaron piedras”.
Visbal indicó que ellos no buscan violencia, “solo el derecho a protestar la acción que nos afecta durante más de tres meses, nos cortaron la luz el 24 de diciembre y el 31, después de las 12 de la noche”, indicando las molestias que han generado en el colectivo.
Por otra parte, la residente de dicho complejo explicó que sus vecinos no se resisten a cooperar con el racionamiento, pero piden que se cumpla la programación que publica Corpoelec en su página web, “siempre se nos niega el servicio a nosotros, y al sector de Los Rastrojos (sector ubicado del otro lado de la intercomunal) no se les va nunca”.
Para finalizar, Visbal advierte que, tras varias cartas enviadas a la compañía de electricidad, “no hemos recibido respuesta alguna”. Espera que las acciones de violencia en contra de ella y sus vecinos cesen.