El candidato presidencial por el Partido Socialista Unido de Venezuela, Nicolás Maduro continuó este sábado con su campaña electoral y en esta oportunidad lo hizo en el estado Amazonas, donde fue recibido por simpatizantes en una concentración en la que el pueblo indígena le ofreció su respaldo y apoyo.
Maduro dijo que la Constitución de 1999 es la única en América Latina que contemplan los derechos del pueblo indígena, al que les prometió seguir el «Plan de la patria» dejado por el fallecido Hugo Chávez.
Tal y como ha ocurrido en estados donde los gobernadores no están con el proceso revolucionario, como Lara y Miranda, en Amazonas también existirá desde el lunes un organismo encargado de gestionar recursos para el estado. Hay que recordar que el primer mandatario de Amazonas, Liborio Guarulla ha manifestado su respaldo a la oposición.
Así lo decidió el presidente encargado, quien informó que se creará una corporación especial para el desarrollo del estado Amazonas, la cual tendrá una inversión inicial de 100 millones de bolívares y tendrá como presidenta a Nicia Maldonado.
Maduro prometió entre otras cosas, la reparación de la vialidad en el estado, así como la dotación de unidades de transporte para la colectividad, y la construcción de un hospital.
La Maldición de Maracanana
En su discurso, el encargado de Venezuela predijo el sábado que una maldición ancestral caerá sobre quienes no voten por él en las elecciones del 14 de abril. El comentario de Maduro fue el último giro surrealista en una agresiva contienda electoral.
Dijo que si gana la oposición privatizará los servicios de salud y educación y les arrebatará sus tierras.
«Si alguien del pueblo vota contra Nicolás Maduro, está votando contra el mismo, le está cayendo la maldición de Maracapana», dijo evocando una leyenda indígena en un mitin en el estado de Amazonas, fronterizo con Brasil y Colombia, con un penacho indígena en la cabeza.
Foto: Reuters