A pesar de la tranquilidad y el luto dentro de la Iglesia católica el Viernes Santo, alrededor de las seis de la tarde se registró un doble crimen en el municipio Andrés Eloy Blanco.
Al parecer Luis Carlos Rojas Duque, de 27 años, recibió la llamada de su expareja pidiéndole que le llevara hasta Sanare, estado Lara, la mesada para su hijo de seis años.
Rojas Duque salió de Acarigua en compañía de su amigo Wilder Alexis Ramírez Almao, de 39 años. Ambos residen en la entidad llanera, pero nunca llegaron al lugar de la cita.
La noche del viernes comenzaron los rumores según los cuales dos personas en una moto, habían sido abaleados en el sector dos de Agua Negra, montañas que colindan con Ospino y Río Acarigua de Portuguesa. Una comisión del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas de la región, se trasladó hasta el lugar, ubicado a dos horas aproximadamente de Sanare, y confirmaron el fallecimiento e hicieron el respectivo levantamiento de los cadáveres.
Según versiones policiales, primero habrían asesinado a Ramírez Almao, mientras Rojas Duque intentó escapar pero alrededor de ocho metros perdió la batalla y cayó. Ambos cuerpos recibieron múltiples heridas por arma de fuego en diferentes partes del cuerpo, por lo cual las posibilidades de sobrevivir eran muy pocas.
Por su parte, vecinos del caserío larense indicaron que es un sitio solitario y que al final de la tarde escucharon unos disparos, al rato salieron, vieron los cuerpos tendidos y fue cuando dieron parte a los organismos correspondientes. También indicaron que la zona se ha vuelto muy peligrosa y semanalmente se roban al menos un vehículo.
Confundidos por el hecho
Los primos de Wilder Alexis, quienes estaban confundidos y consternados por la noticia, se acercaron hasta la sala de Anatomía Patológica del Hospital Central de Barquisimeto. «No sabemos nada; el viernes nos llamó la hermana de él desde Acarigua para contarnos que lo habían matado. El trabajaba como comerciante informal en el Terminal Terrestre de allá”, dijo Magally Almao.
Se pudo conocer que el segundo de seis hermanos, vivía en el barrio “El Muertico” de las ciudades gemelas de Portuguesa, en compañía de su esposa y sus dos hijas adolescentes.
Capturado presunto implicado
Luego del levantamiento de los cadáveres, la comisión conjunta del Cicpc y la Guardia Nacional Bolivariana, se dispusieron a bajar hasta la población de Sanare en la camioneta machito de placas GN1682, rotulada y con la coctelera encendida. En ese momento fueron interceptados por otras dos camionetas a la altura del sector Casa e’ Tabla.
Se trataba de una Toyota azul de placas A73BK6S y una Toyota tipo machito gris con placa AB044VK, la cual había sido robada y transportaba parte de vehículos así como también algunos repuestos los cuales se presumen sean de otros autos que estaban desvalijando.
Al notar la presencia de estos carros los funcionarios les dieron la voz de alto, pero los sujetos respondieron con disparos, lo cual generó un enfrentamiento. El conductor del machito gris aceptó entregarse, luego de arrojar su arma hacia el monte.
Los otros dos sujetos, a bordo del carro azul, el cual abandonaron, se ocultaron entre las montañas.
Eran las 4:30 de la madrugada del sábado, la zona estaba oscura y a pesar de que rastrearon el lugar para dar con el paradero no pudieron detenerlos. Cuando decidieron regresar hacia los automóviles, desde la oscuridad del monte donde estaban escondidas las otras dos personas, éstas volvieron a disparar. Lo que no se sabe es si querían rescatar al que se entregó o asesinarlo; tampoco se descarta la participación en el doble asesinato, pues en la camioneta gris se encontró una concha de bala y en la azul un arma de fuego, a la cual se le realizarán las pruebas necesarias.
Identificado
Como Francisco Javier Villegas Meléndez, de 33 años, fue identificado el sujeto capturado quien se presume esté implicado en el hecho de Agua Negra. De manera extraoficial se supo que éste era hermano de alias “El Guaro”, asesinado a finales del año pasado en el oriente del país. Será puesto a la orden de la fiscalía del Ministerio Público.
La mañana del sábado funcionarios del destacamento de la Guardia Nacional Bolivariana de Sanare en conjunto a la Policía Municipal emprendieron camino nuevamente a la zona para intentar encontrar a los que se escaparon pero la acción fue infructífera.