La municipalidad de Nueva York apeló a los tribunales a fin de restituya la prohibición al expendio de bebidas gaseosas de tamaño gigante y de otras bebidas azucaradas, una medida que fue bloqueada por un juez de Manhattan un día antes de que entrara en vigencia.
La ciudad ha asegurado que apelará e indicó el jueves que los abogados habían presentado los documentos en la tarde del lunes.
En su decisión del 11 de marzo, el magistrado de la Corte Suprema estatal, Milton Tingling, indicó que el límite de 16 onzas (476 mililitros) a las bebidas gaseosas y otras bebidas azucaradas se aplica arbitrariamente sólo a algunos productos de ese tipo y a algunos lugares que las venden.
«Las lagunas que presenta este fallo en realidad frustran el propósito establecido en esta orden», señaló el juez Tingling en su fallo, que fue considerado como una victoria para la industria de las bebidas azucaradas, restaurantes y otros grupo de negocios que han calificado de injusta la prohibición.
Asimismo, el juez dijo que la Junta de Salud designada por el alcalde Michael Bloomberg se inmiscuía en la autoridad del Concejo Municipal cuando impuso la orden.
En su apelación la municipalidad refuta esos puntos.
«La orden tiene por objeto hacer que el consumidor tome una decisión informada y consciente para adquirir grandes cantidades de bebidas azucaradas», señala. «Por consiguiente, aunque el consumidor es libre de consumir más de 16 onzas al ordenar una segunda bebida, cuando pide repetición o va a otra tienda, el cliente tomará una decisión bien informada».
La alcaldía también dijo que la Junta de Salud tenía autoridad legislativa, y «tiene el poder de emitir reglas sustanciales y estándares para la salud pública».
El portavoz de la Asociación de Bebidas, Christopher Gindlesperger, se refirió a la decisión inicial de revertir la prohibición. «Sentimos que la decisión del magistrado fue enérgica y tenemos confianza en el fallo».
Asimismo, la municipalidad neoyorquina dijo el jueves que otras organizaciones habían presentado informes legales en respaldo de la apelación de la alcaldía. Entre esas organizaciones se incluyen la Asociación Nacional de Salud Hispana y Asociación Nacional de Juntas Locales de Salud, junto con otros 30 grupos.
Bloomberg ha manifestado públicamente que la salud pública es la piedra angular de su gobierno municipal, y ha impuesto órdenes como la publicación del conteo de calorías en el menú en la venta de alimentos y la prohibición de grasa trans en la cocina de restaurantes.