Johan Santana sabe que no lanzará cuando los Mets de Nueva York comiencen su temporada el 1 de abril, pero no tiene idea sobre cuándo subirá al montículo.
El zurdo venezolano tenía previsto lanzar el sábado unos 90 pies desde terreno plano, un aumento de los 60 pies que tiró la semana pasada. Todavía tiene que llegar a unos 180 pies para que los Mets le permitan realizar su primera sesión de bullpen desde el 3 de marzo.
«Estoy mejorando, simplemente no sé cuándo volveré a lanzar», dijo el as de 34 años el sábado. «Ese es el problema, que no nos podemos adelantar. La estrategia es tratar de que cada día sea un buen día, así que mañana veremos y lo haremos de nuevo, hasta que sienta que podemos hacerlo sin ningún problema».
El ganador de dos Cy Young se perderá toda la pretemporada por debilidad en el brazo y comenzará la campaña en la lista de lesionados.
«Es un proceso lento», indicó Santana. «Día por día, hay que estar seguros que cada día me sienta mejor y haya mejoría. Eso es lo que estoy haciendo ahora».
Santana fue examinado por el doctor David Altcheck al comienzo de la pretemporada y le dijeron que no tiene problemas estructurales con el hombro izquierdo, que le repararon con una cirugía.
El venezolano no lanzó en las mayores en 2011 tras la operación de hombro. Tuvo marca de 6-9 con 4.85 de efectividad en 21 salidas el año pasado, cuando tiró el primer no-hitter en la historia de los Mets el 1 de junio ante San Luis.
Su temporada culminó a mediados de agosto por una dolencia en la zona lumbar, y apenas soltó el brazo durante las vacaciones, por lo que se atrasó en su cronograma al llegar a los campos de entrenamiento el mes pasado.
Santana admitió que «no tenía la fortaleza necesaria en el hombro».
«Me sentía fabuloso al llegar a los campos. Estaba muy emocionado y todo cambió en un par de días», relató.
El zurdo recibirá 25,5 millones de dólares este año, en la última temporada de un contrato por seis años y 137,5 millones de dólares. Los Mets tienen una opción por 25 millones para 2014, con una cláusula de rescisión por 5,5 millones.
