La policía española anunció hoy que interceptó en el Atlántico un barco cargado con casi dos toneladas de cocaína con destino a Europa, que llegaba desde Venezuela.
Tras una investigación realizada con los servicios portugueses y británicos, una unidad de élite interceptó el barco el 15 de marzo, a 700 millas náuticas al suroeste de Cabo Verde, según un comunicado de la policía y transmitido por la agencia AFP.
En el procedimiento los cinco marinos: cuatro brasileños y un coreano, fueron detenidos así como los presuntos cuatro organizadores del tráfico, detenidos al día siguiente en Oporto, Portugal.
La investigación se inició en Portugal, donde los especialistas antidroga de los tres países implicados se percataron de la existencia de un grupo de traficantes que operaba desde Oporto, que había efectuado en febrero un viaje a Venezuela.
El barco que transportaba la mercancía, que iba probablemente hacia Portugal o Galicia, fue localizado cuando esperaba transferir la droga a la tripulación de otro barco, según el comunicado.
«Tras hacer efectivo el apresamiento de la nave se detuvo en el interior del barco a sus cinco tripulantes y se realizó una inspección de seguridad en la que se hallaron numerosos fardos con cocaína, con un peso aproximado de 2.000 kilogramos, ocultos en el pañol de proa. Asimismo, se encontró una mochila con una gran cantidad de dólares», indicó el comunicado.