De la poesía visual del artista plástico Rolando Quero surgió una serie que recoge las distintas etapas de creación que trazaron su porvenir en la pintura.
La Galería Rafael Monasterios de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA) vistió sus espacios con la textura y dinamismo de este creador, natural de Villa de Cura, estado Aragua.
Creadores, docentes, músicos y seguidores de la pintura asistieron a la inauguración de Formas y sonidos del paisaje, la propuesta más reciente del autor complacido en presentar, por primera ocasión, una individual en Barquisimeto.
Las autoridades académicas de la UCLA, Francesco Leone; Nelly Velásquez, rectora encargada; Carlos Figueredo, director de Cultura; César Lobo, director de Artes Plásticas; Sandra García y Henry Riera, curadores y museógrafos; presidieron la amena velada junto a Quero.
Como agradecimiento al virtuoso, Velásquez le impuso el Botón 50º aniversario y se le obsequió una edición especial del tomo sobre la historia de la institución.
La riqueza del color
Formas y sonidos del paisaje comprende 52 obras realizadas en 2012. Quero confesó que la Galería Rafael Monasterios lo arropó en su primer encuentro. Luego de visualizar los espacios se inspiró en esta serie que recaba su trayectoria.
“Es un resumen desde que llegué a Venezuela en el año 1999. Es un resumen de la propuesta, de mis lunas, mis soles, mi aserrín y mi asfalto líquido”, reiteró.
Marcada por la textura y el color, las obras hacen eco de la nobleza del aserrín y los trozos de madera que arrojan los fusteros de Villa de Cura y son abrazados por Quero en su búsqueda de materiales naturales.
“Mi obra llegó a un punto de madurez, pero para seguir con el trabajo. Continuaré quizás con otras paletas, colores y elementos”, dijo.
Abstracción y paisaje
José Napoleón Oropeza, a cargo del texto El paisaje se torna remolino destacado en el catálogo de la muestra, apuntó que el artista, tal vez sin premeditación, atrapó en la poética de este trabajo “un homenaje a los cielos barquisimetanos”.
Figueredo, titular de la Dirección de Cultura de la UCLA, anunció que la selección es parte de las iniciativas a propósito del cincuentenario de la casa de estudios.
“El pintor se inclina a la abstracción y prevalece el círculo, lo cromático. Nos encontramos con descomposiciones”, refirió.
Por su parte, los profesores García y Lobo que integran el equipo de museografía, indicaron que todas las pinturas son extraordinarias.
“Hay dos elementos fundamentales, la riqueza y el color. Quero nos relató que se inspiró en la guacamaya, de Brasil. También hay rasgos de su formación en Barcelona, España”, precisó Lobo.
García agregó que la obra posee grandes texturas y contrastes. “Tiene madurez. Cada composición es diferente aunque hay coincidencia de elementos”.
El especialista Gabino Matos, miembro de la Asociación Internacional de Críticos de Arte y consecuente seguidor de la obra de Quero, señaló que el artista tiene una interpretación particular del paisaje.
“Hablar del término paisaje en el ámbito de la cultura larense tiene un peso muy específico porque aquí se desarrolló una larga tradición paisajística en la pintura. Pero el paisaje de Quero no es representativo, no es aludido ni simbólico. Más bien es una suerte de referencia de lo micro expresado en lo macro”.
Observó que el autor de la exposición crea una hermenéutica del paisaje que más allá del ojo debe apreciarse con la mente.
Itinerancia
Formas y sonidos del paisaje permanecerá en la Galería Rafael Monasterios hasta el próximo 16 de abril. Luego tendrá un viaje por la geografía nacional.
Comenzará el periplo por la Casa de la Cultura de El Tocuyo, el Ateneo Casta J. Riera de Churuguara, Mérida, Trujillo, Nueva Esparta y Valencia.
Liz Gascón
Fotos: Edickson Durán