A pesar de todas la reacciones que ha desatado el fallecimiento del Presidente Chávez, su uso en la campaña de Nicolás Maduro y el enfrentamiento entre éste y el candidato Henrique Capriles, el 14 de abril «no tenemos más decisión que votar o entregar el país al destino de la supresión de la democracia, la justicia y la libertad», expresó el diputado Miguel Ángel Rodríguez.
En dicho pronunciamiento, también destacó que comprende la frustración de quienes protestan por la «corrupción electoral», medida en el uso de todos los recursos humanos, financieros y activos civiles y militares del Estado a favor del candidato oficialista, pero advierte que siempre se ha estado consciente de esta ilegal desigualdad y nunca se ha dejado de denunciar y de exigir la normalización del sistema electoral como vehículo pacífico para decidir las cosas en el país.
«Los votos de todos, de los seguidores de Maduro y de todos los que piensan distinto a quienes heredan el gobierno del Comandante Chávez, deben ser las únicas expresiones que diriman el futuro de nuestros hijos. Que se respete al contendor y que se debata lo que propone Henrique Capriles y lo que propone Nicolás Maduro, debería ser el único signo de esta campaña», mencionó.
De igual manera, señaló que incluso antes de que se informara sobre los próximos comicios electorales a causa del fallecimiento del Presidente Chávez, se había iniciado una movida nacional a instancia de parlamentarios que solicitaron la eliminación de las «máquinas informadoras de ubicación y de huellas de electores, limitar a sus verdaderas responsabilidades al Plan República, abrir todas las cajas y contar todas las boletas aun siendo automatizada la votación, y otras medidas que hicieran igualitaria la condición de participación».
Además, destacó que aunque sería de ilusos pensar que el CNE atienda todas estas peticiones, por ahora, peor será entregarse por omisión electoral, como sucedió en muchas entidades durante las elecciones de diciembre, cuando el Partido Socialista y sus aliados se quedaron con 20 de las 23 gobernaciones.
El diputado reconoció que en la campaña existirá fuerte controversia sobre los efectos que ha dejado ver Nicolás Maduro de su incipiente gestión de designado jefe de la revolución.
«Pero una cosa es hablar de la devaluación, de la escasez, del empeoramiento de la inseguridad; y otra cosa es una acción fratricida a causa de las distintas dimensiones que se le quieran dar a la memoria de Hugo Chávez», señaló.
Finalmente, recalcó que “por más que se grite no precisamente se obtienen más votos, y que justo por la desigualdad comunicacional y propagandística, todos los votos expresados por Capriles el 7 de octubre más los que se inhibieron aun estando en desacuerdo con el proyecto del socialismo a lo cubano, serán más fuertes que cualquier abuso orquestado desde el poder nacional».