El Gobierno venezolano está diseñando una nuevo «marcador» para establecer un tipo de cambio paralelo al oficial que suavice la especulación en el mercado informal de divisas, dijo el miércoles el ministro de Energía, Rafael Ramírez.
La administración del recién fallecido presidente Hugo Chávez decretó en febrero una devaluación del 32 por ciento que llevó el tipo de cambio fijo controlado a 6,3 bolívares por dólar, desde el 4,3 previo, para aliviar las finanzas del país, que celebrará en abril una nueva elección presidencial.
No obstante, en el mercado no oficial el tipo de cambio sube constantemente y el actual nivel casi cuadruplica al oficial
Ramírez y el presidente encargado, Nicolás Maduro, han dicho que cuando Chávez estaba convaleciente en Cuba aprobó una serie de medidas económicas que aún no han sido anunciadas.
«No quiero meterme en materias que no son estrictamente mi competencia, pero sobre el dólar paralelo vamos a poner otro marcador.
Ahorita lo que es la especulación, creemos que no es una especulación ingenua. Hay un ataque contra nuestra moneda orientado desde fuerzas que permanentemente han conspirado contra la estabilidad del país», dijo Ramírez a la prensa.
El funcionario, quien también es presidente de la gigantesca petrolera estatal PDVSA, no dio detalles de cómo pretenden fijar esa nueva referencia.
«Ya había un informe de organismos de inteligencia norteamericanos que hablan de una implosión del sistema económico venezolano, probablemente eso es lo que ellos están tratando de hacer. Existe una ventaja estratégica: que el Estado tiene el control de los sectores más importantes de la economía», agregó.
La mayor parte de las divisas que ingresan a Venezuela provienen de las exportaciones de petróleo, pero analistas dicen que el fuerte gasto público del Gobierno es insostenible por esa vía y que por ello la venta de dólares «oficiales» ha sido dramáticamente restringida.
Muchos sectores de la economía deben recurrir al mercado informal para suplir sus requerimientos de dólares, por lo que muchos valores en la economía se fijan en referencia al valor del dólar paralelo.
Ello, a su vez, presiona los precios al alza.
«Aquí el principal elemento de estabilidad es el aporte de divisas de las exportaciones. Todos los días se produce petróleo, se vende y se exporta, eso no se ha parado en ninguna circunstancia, así que tenemos las herramientas para ajustar lo que haya que ajustar en la economía», dijo Ramírez.
Además de devaluar en febrero, el Gobierno anunció la creación de un nuevo organismo cambiario que aún no entra en funciones.
También eliminó un mecanismo cambiario paralelo (SITME)manejado por el Banco Central de Venezuela con arbitrajes de bonos, que tenía un tipo de cambio alternativo de 5,3 bolívares por dólar.
Esa decisión ha puesto contra las cuerdas a muchos importadores y viajeros, que usaban al SITME para comprar divisas y ahora deben recurrir al mercado no oficial. Ramírez dijo que no está previsto sustituir al SITME con un mecanismo similar.
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