Irán estudia demandar a Hollywood por la película «Argo», ganadora del Oscar, debido a la supuesta «descripción poco realista» del país, informaron el martes medios iraníes.
Varios medios noticiosos, entre ellos el diario reformista Shargh, dijeron que la abogada francesa Isabelle Coutant-Peyre está en Irán para conversar con las autoridades sobre cómo y dónde presentar la demanda. Coutant-Peyre es también la abogada del tristemente célebre terrorista de origen venezolano Ilich Ramírez Sánchez, conocido como Carlos El Chacal.
Después del ataque a la embajada estadounidense en Teherán en 1979, 52 ciudadanos de ese país fueron retenidos como rehenes durante 444 días, pero seis empleados de la embajada recibieron refugio por parte del embajador de Canadá. Su huida, disfrazados como integrantes de un supuesto equipo cinematográfico, se narra en «Argo».
Después que el filme ganó el Oscar en febrero, funcionarios iraníes calificaron «Argo» de propaganda contra Irán y favorable a la CIA.
Aunque la película no se ha visto en los cines de Irán, muchos iraníes la han visto en DVDs pirateados y ha provocado un animado debate que ha sacado a relucir diferencias generacionales. Los iraníes que participaron en la Revolución Islámica de 1979 han criticado fuertemente la descripción del Teherán de la época, pero los que son demasiado jóvenes para recordar los hechos están deseosos de tener un punto de vista diferente sobre lo sucedido.
La decisión sobre la demanda surgió después que un grupo de autoridades culturales y críticos de cine iraníes vieron la película en una presentación privada en Teherán el lunes por la noche.
La reunión, llamada «El engaño de Hollywood», discutió varios aspectos jurídicos de presentar una demanda, indicaron medios noticiosos sin ofrecer detalles. No están claros que acusaciones específicas Irán pudiera presentar y qué tribunal Teherán pudiera escoger si decide hacerlo.
Los presentes en la reunión descalificaron a «Argo», tildándola de una «violación de normas culturales internacionales». Una declaración emitida después de la reunión indicó que «premiar una película anti-iraní es un ataque propagandístico contra nuestra nación y toda la humanidad».
La declaración no aclaró las razones por las que considera que la película no es realista, pero autoridades han acusado a «Argo» de presentar a los iraníes como personas «demasiado violentas».
También han dicho que el director del filme no se refirió a otros documentales sobre la toma de la embajada ni discutió las razones de la crisis, como al gran resentimiento contra Estados Unidos por el golpe de Estado apoyado por la CIA en 1953 que derrocó al primer ministro Mohammad Mossadegh, electo democráticamente, y restauró la monarquía prooccidental en Irán.
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