La desesperación y frustración se incrementa cada día entre las familias residentes en varias comunidades al sureste de Yaritagua a causa de los olores nauseabundos que emanan de las aguas negras procedentes de una red de cloacas rotas que caen a una quebrada.
El problema se inicia en el sector El Ronco, donde, accidental o intencionalmente, se abrió un enorme boquete a la tubería que transporta las aguas servidas de la ciudad, formándose allí una especie de cascada, pero no clara y agradable sino negra con muy malos olores.
Además de quienes residen en El Ronco, están afectados los habitantes de otros sectores como La Pradera, 26 de Abril, La Mora, Aldeas La Paz, Las Casitas, La Fuente, San Antonio, incluso hasta Tapa la Lucha, que está más lejano.
“Esto no se puede soportar porque el mal olor es a toda hora por lo que uno no puede dormir, comer o hacer nada tranquilo”, manifestó Mildred Durán, quien vive en La Mora.
Dijo que han acudido a todas partes en busca de solución y siguen esperando, a pesar de que ya se han presentado varios casos de dengue entre niños.
“Lo único que dicen es que existe un proyecto para reparar la red cloacal y canalizar la quebrada pero no vemos nada concreto”, indicó.
María Suárez, Lilianne Parra y Jesús Martínez, también residentes de La Mora indicaron que, además de las aguas negras, algunas personas inescrupulosas se han dedicadoa dejar basura y animales muertos en la quebrada, lo que agrava el problema ambiental.
“Eso ha traído como consecuencia gran cantidad de enormes ratas que se nos meten en las casas y hasta pueden morder a uno”, afirmó Suárez.
Lilianne Parra, por su parte, pidió fumigación urgente para acabar con los zancudos que se han reproducido últimamente y también son causales de enfermedades.
Muy cerca de la quebrada, en La Mora, está la cancha donde los niños y jóvenes se reúnen a practicar algún deporte, pero la mayoría de las veces deben desistir debido a que los malos olores son insoportables.
“El consejo comunal, que está vencido, debe actuar para que el organismo al cual compete el problema venga a resolverlo antes de que se desate aquí un brote de alguna enfermedad a causa de ese foco de contaminación”, enfatizó María Suárez.