El abogado y licenciado en estudios internacionales Julio Portillo, señaló que con la enfermedad del presidente Hugo Chávez, la política exterior experimentó una baja ante la ausencia del jefe de Estado en varias cumbres internacionales, como la del Mercosur y del Alba, la de los países no alineados y el foro de Sao Paulo.
Durante una conferencia dictada a alumnos de la Universidad Fermín Toro, el diplomático destacó las “grandes fallas de la cancillería”, la cual ha estado desempeñada en los últimos años por titulares que no son hombres del oficio.
En cuanto a la cancillería local, dijo que la misma no ha tenido el acierto esperado y necesariamente debe cambiar, ya que fractura las relaciones internacionales generando una enemistad innecesaria por el agresivo discurso de Chávez contra jefes de Gobierno y altas personalidades de Estados Unidos, España, Israel, Chile, República Dominicana, Colombia y Alemania.
Citó como ejemplo los problemas fronterizos que Venezuela tiene con ocho países de América Latina, entre estos Colombia, Brasil, Guyana y todas las islas angloparlantes donde existieron escuelas de español, ahora cerradas.
Portillo lamentó que esta actitud de la cancillería originara dificultades para los venezolanos en el exterior. “Mi hermana fue secretaria en la FAO durante 19 años y nunca de Venezuela la llamaron para hacerle alguna pregunta o solicitarle apoyo institucional”, adujo.
Calificó a Venezuela de un “Estado vasallo” porque atiende al pie de la letra las decisiones políticas, económicas y hasta de salud desde Cuba, por Fidel Castro, limitándole la soberanía a esta Nación, plasmado en el derecho Internacional público.
En otro orden de ideas, fustigó que mientras el presidente Chávez y funcionarios de su tren ejecutivo se limitan a emitir discursos políticos y hacer propaganda socialista en encuentros de mandatarios fuera del país, sus pares, en el caso de Brasil y Colombia, en una reunión celebrada en Chile, por el contrario, estaban estableciendo relaciones diplomáticas y de negocios con trescientos empresarios europeos.
Foto: Emanuele Sorge