No puso en riesgo a su gente
Redacto este escrito en momentos que los venezolanos despertamos con la noticia de la supuesta llegada del Presidente reelecto desde Cuba. En cuanto a la renuncia anunciada por el Papa Benedicto XVI, la semana anterior, cabe resaltar que el sumo pontífice reconoce lo exigente del cargo y, como el se siente un tanto agotado, tomó esa gran decisión. De esa manera, evita maltratar su organismo y, a la vez, da oportunidad para que otros vivan esa experiencia de ser el representante de la comunidad católica a nivel mundial. Ojalá esto sirva de ejemplo a muchos gobernantes con problemas de salud, que dejen a un lado sus ansias de poder y renuncien sabiamente como lo hizo el Papa.
Neptalí Paredes
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La renuncia del Papa
Quienes hemos nacido y criado en una familia de profundo arraigo católica, quienes hemos estudiado nuestra primaria y secundaria en el seno del catolicismo, quienes en el curso de la adultez de nuestras vidas seguimos al lado del Cristianismo por razones de trabajo, podemos decir con sobrada autoridad moral que la renuncia del Papa es una demostración de desprendimiento al poder y a los beneficios materiales que da el cargo. Le da una lección al mundo que en la vida hay que saber el momento del retiro, hay que retirase para no hacerle mal a otros o a sí mismo. Hay que seguir el viejo adagio: “Nadie en la vida es indispensable, si acaso es necesario”, Muchos líderes les han hecho creer sus partidarios que sin ellos la organización que dirigen se va a desmoronar, nada más lejos de la verdad. Bolívar con su genio lo advirtió” Nada es tan perjudicial como dejar permanecer mucho tiempo en el poder a un ciudadano. Porque el pueblo se acostumbra a obedecerle y él a mandarlo lo que origina la usurpación y la tiranía”. La Iglesia Católica es dirigida por seres humanos con sus virtudes y miserias, sin embargo, el Papa se ha alzado sobre todas esas cosas, se dio cuenta, siempre lo ha hecho, que él es un ser humano, con virtudes y fallas, y ha decidido renunciar, ¡la edad es implacable y, a pesar de ser el representante de Dios en la Tierra, él sabe que su salud es finita y su vida también! No se aferra al poder porque sus súbditos le hagan creer que es indispensable y que no habrá otro mejor. Sin duda que El Papa echa por tierra aquello que me debo al pueblo y no retendrá el poder por complacer su ego que tanto daño le hace a un país, cuando un gobernante se cree ungido por Dios y no se da cuenta que todo tiene su fin. Más vale retirarse a tiempo y con dignidad que permanecer en el poder siendo marioneta de sus acólitos.
Marcelo Piña
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La renuncia papal
A mi me parece que Benedicto XVI ha tomado la dedición de su vida y con esto ha demostrado desprendimiento y humildad al reconocer que ya no esta en el cien por ciento de su capacidad para llevar sobre sus hombros una responsabilidad tan grande como es la de conducir a la iglesia católica por un buen camino.
En este momento, cuando en nuestro mundo abunda la vanidad y la soberbia y en donde vemos como muchos seres humanos que ocupan puestos de poder se ufanan de sus cargos y dan mal ejemplo a sus gobernados, es precisamente cuando hace falta personas con poder que den buenos ejemplos y recuperar así la confianza en los líderes religiosos, políticos y gremiales que nos conduzcan por el mejor sendero.
A Benedicto XVI le tocó una tarea muy dura o, más bien, tenía un reto muy difícil que era la de superar la imagen de popularidad que gozaba Juan Pablo II. El Papa actual es conocido por su ortodoxia, esto contribuyó a que lo encasillaran e imagino que en el fondo se sintió incomprendido, hizo comentarios sobre los preservativos cuando dijo que no eran seguros y recibió criticas, en algún momento criticó el fanatismo religioso y recibió criticas de los árabes y, a mi manera de ver, hizo lo correcto pues en una sociedad cada vez más abierta los temas que una vez fueron tabú hoy en día tienen que ser tratados abiertamente. En todo caso, a pesar de las críticas que pueda haber recibido, planteó los temas y puso las cartas sobre la mesa de manera que el debe sentirse satisfecho de la labor pastoral cumplida.
En mi opinión muy personal, la iglesia católica tiene que evolucionar pues estamos viviendo tiempos modernos. Por ejemplo, yo no vería mal que los curas se casasen y tuviesen hijos, después de todo son seres humanos con las mismas necesidades que el resto de los mortales y, tal vez, una de las reglas seria que los curas casados no podrían llegar a cardenales y, casi seguro estoy, que la sociedad vería esto con buenos ojos y se haría mucho mas fácil reclutar jóvenes para el sacerdocio.
En fin, esperamos que el nuevo papa posea el suficiente carisma para encantar a una sociedad que necesita buenos guías espirituales que sean una referencia positiva para el mundo.
Alirio Palencia
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Solo Dios basta
Quisiera dejarles algunas reflexiones sobre el tema: En primer lugar considero que todos los católicos estamos llamados a formarnos en el ámbito religioso igual que en el profesional para poder defender nuestra fe. La Biblia nos invita en muchas oportunidades a no tener miedo (Mateo 14, 27; 17,7; 27, 5; Jn 14, 27;1Pd 3, 15). Dios se vale de la debilidad de los hombres para llevar a cabo su Plan de Salvación, pero nadie es imprescindible (como decía Santa Teresa en su hermosa oración: sólo Dios basta). Nuestro tiempo no es el de El Señor (Eclesiastés 3). La Cuaresma es un tiempo de gracia de Dios y de oración, renunciar en este tiempo es una «audacia» del sucesor de Pedro, al Cardenal Ratzinger de seguro lo inspiró también el Espíritu Santo luego de mucha oración. Les invito a buscar en internet una reflexión de un prominente empresario judío/estadounidense, Sam Miller, de hace varios años atrás, llamada “siéntete orgulloso de ser católico”, en la cual éste judío defiende a la Iglesia Católica por todas las obras de caridad que hace a nivel mundial (hospitales, universidades, misioneros, museos…), y es que la Iglesia somos todos, por ello no debemos hacer coro a los detractores de nuestra una, santa, apostólica y amada Iglesia Católica. No caigamos en la tentación de comparar al Papa Juan Pablo II con el Papa Benedicto XVI, pues tendríamos que decir como los jóvenes de la JMJ 2011 “a Juan Pablo íbamos a ver y a Benedicto venimos a escuchar”, Oremos mucho por los Cardenales que inspirados por el Espíritu Santo elegirán al nuevo Vicario de Dios en la tierra y hagamos nosotros también nuestra parte. Nosotros también somos Iglesia.
Alba Arrieche de Biaggini
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Muestra de dignidad honestidad y respeto.
La máxima autoridad de la iglesia católica ha manifestado su dignidad, su honestidad y el respeto a sus representados al despojarse del poder, examinando sus condiciones, capacidad, física y mental para tomar semejante decisión. El papa consideró que no podía ejercer cabalmente las funciones, actividades relacionadas con su cargo y con mucha responsabilidad y seriedad lo manifestó para dar paso a un proceso de elección de su sustituto.
El papa no se aferró al poder, fue una gran manifestación de amor por si mismo y por todos los católicos del mundo.
Este es un digno ejemplo a seguir por aquellos, quienes aferrados al poder, no se dan cuenta que su renuncia, lejos de perjudicarlo, beneficia a 27 millones de venezolanos. ¡Tú también puedes! Dale oportunidad a otros que, con toda seguridad, lo pueden hacer mejor
Mirna Bustillos de Tori
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El bien colectivo por el intelectual
Cuando una masa necesita tranquilidad y quietud, es necesario que sus líderes sean los primeros en tomar decisiones que le brinden esa sensación a su pueblo. Es un acto de humildad y de supremo liderazgo, es el acto máximo de un líder para con sus seguidores. No hay duda que Benedicto XVI es un gran religioso que, antes de eso, es un mejor hombre, porque supo dar un paso al costado debido a las diferentes dificultades personales, de salud, o de cualquier índole que lo haya llevado a tomar esa decisión, antes que esa causa hubiese afectado a sus seguidores. Es por eso que, más allá de ser un acto egoísta, es un acto de solidaridad y de profundo amor al pueblo que representa y que ha decidido reivindicar con sus decisiones de desprenderse del trono máximo de la Iglesia Católica.
En todo caso, para el que comparta y no la religión que el representa, es un ejemplo de desprendimiento, de no aferrarse a un puesto de forma vitalicia, de saber que, a pesar de las comodidades que te brinde un puesto y el poder que te confiera, está por delante el ser humano.
Así pues, cada uno debemos reflejarnos en ese espejo, en nuestro micro mundo y aquellos que tengan más responsabilidades en su cargo.
Rafael Torres
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¿Qué habrá detrás de esto?
Es muy fácil pensar en todas aquellas historias que nos han contado acerca de una institución como la iglesia, con sus secretos, con su misterio, con aquella historia que viste con un manto negro “la casa de Dios en la Tierra”.
Pero, para aquellos a quienes la inquietud nos carcome la cabeza y no nos podemos tragar aquello que nos venden por encima, se ajusta la pregunta con la que he titulado este artículo de opinión.
Es tan poco frecuente, que a lo largo de la historia, un pontífice del nivel de un Papa haya decidido dejar a un lado su puesto para dar paso a alguien más, ¿qué clase de presión habrá tenido Benedicto que lo motivó a esta decisión? ¿Qué no pudo cambiar? ¿Qué descubrió?
Yo espero estar aún con vida para cuando los secretos que motivaron a esta decisión hayan salido a la luz pública. Aunque no tengo mucha esperanza, tomando en cuenta que aún no han sido desvelado las injusticia cometidas en la inquisición y el “dark age” (oscurantismo
Felipe Tovar
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Aquel que sea cristiano, ¡que lo imite!
Todo aquel que se haga llamar cristiano, debe seguir el ejemplo de Benedicto XVI, quien ha decidido apartarse del poder que le confiere la iglesia para recuperarse de la enfermedad que la ha perseguido por tanto tiempo, entendiendo que es la única manera de recuperarse sin poner en riesgo las funciones que por deber le corresponde a quien ocupe esa investidura. Ojalá que todos aquellos que se hacen llamar cristianos, hasta en cámaras de televisión lo han hecho público, siguieran el ejemplo que ha dado este ser con su gran sabiduría. De la Iglesia se puede decir cualquier cosa (opinar es gratis aún) pero de lo único que no se puede decir es que no está llena de sabiduría y, es precisamente, lo que ha pasado en este caso. Yo creo, en el mejor de los casos, si Benedicto renunció por su enfermedad, ha tomado la decisión correcta, pues prefirió su salud antes que sus apetencias personales y de grandeza, además le brindó a la comunidad católica evitarse una preocupación menos, debido a que no estará pendiente de la salud mientras esté al mando de esta institución. Si es por otra causa, pues no sabríamos cuáles fueron los motivos y por eso no podría opinar de ello.
Petra Gómez
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Próximo Tema:
Negativa sobre medida humanitaria a Simonovis
El pasado jueves, la jueza Rosa Dorita de Freitas negó la medida humanitaria al ex comisario de la Policía Metropolitana Iván Simonovis, donde también se decidió su traslado y el ingreso de un fisioterapeuta para ayudarlo con su condición de salud. ¿Qué opina usted de la decisión? ¿Está de acuerdo con una medida humanitaria? ¿Por qué la decisión de la jueza?
Envíenos su opinión a [email protected] antes del viernes 1 de marzo y será publicado 4 del mismo mes en la página 2 del cuerpo A.
