Después de casi ocho años, Diego Armando Maradona volvió el lunes a Italia para tratar de solucionar sus problemas con el fisco, que le exige el pago de casi 50 millones de dólares en impuestos atrasados de la época cuando jugaba en el Napoli, en los años 80.
El mítico Pibe de Oro, que no había estado en Italia desde junio de 2005, de inmediato se trasladó a Nápoles, la ciudad que lo idolatra, donde ofrecerá el martes una conferencia de prensa e inmediatamente después dejará el país.
Maradona fue condenado en 2005 a pagar 37,2 millones de euros (49 millones de dólares), pero la justicia italiana decidió el pasado 3 de noviembre comenzar de nuevo el proceso por errores de procedimiento y ha abierto una nueva investigación.
En un reciente video el jugador reiteró su inocencia.
«No soy un defraudador del fisco. Yo jugaba al fútbol y firmaban en mi lugar. No tengo miedo de regresar a Italia y el fisco deberá reunir las pruebas de estas acusaciones. Nunca firmé nada y los verdaderos culpables circulan libremente y pueden ir tranquilamente a Nápoles y yo no. Es injusto», añadió.
Maradona marcó 115 goles en 259 partidos entre 1984 y 1991 con el Nápoles y le dio una Copa de UEFA (1989), dos títulos de Liga (1987 -el primero que conseguía en toda su historia- y 1990), una Copa de Italia (1987) y una Supercopa de Italia (1990).
En la actualidad es embajador deportivo de los Emiratos Arabes Unidos tras su destitución en 2012 como entrenador del Al Wasl.