Un grupo de representantes de la Unidad Educativa Nacional Bolivariana Inés Lucía Yépez decidió tomar medidas extremas “ante la falta de respuesta” de la Zona Educativa de Lara a su petición de un cambio de directiva en el plantel.
Sus voces no han sido escuchadas durante tres años y la desesperación llevó a unas diez madres a trancar, durante casi dos horas, la carrera 19 con calle 39, sitio donde quemaron cauchos para hacerse sentir.
Ante la acción, dos funcionarios de la Zona se acercaron al sitio para escuchar la versión de las representantes y durante una reunión se comprometieron a dar una respuesta el lunes 25 de febrero, luego de un análisis exhaustivo del caso.
“Exigimos respeto; fuera directivos encargados: Carmen Elena Guerra y Orquídea Jordán. No los queremos”, decía una de las pancartas usada en la protesta.
Neisismar Vargas, una de las representantes, contó que figura entre las fallas de la directiva que “ha evitado por todos los medios rendir cuentas de su gestión, en los últimos tres años. Por ejemplo, no dicen qué hacen con la colaboración (de 10 bolívares) que se cancela por cada estudiante al inicio del año escolar”.
Indicó que se cansaron de consignar documentos que prueban las supuestas irregularidades ocurridas dentro de la escuela, en el despacho regional del Ministerio de Educación y sin recibir ninguna respuesta.
“Funcionarios de la Zona Educativa visitaron el lunes la institución y dijeron que en 15 días darían respuesta, algo que rechazamos de forma contundente”.
Alegan que la Zona “se burla” de los representantes y evita sostener reuniones con los voceros.
“El lunes quedamos fuera de la reunión que realizaron con la directiva, pese a que somos quienes sabemos la verdadera situación del plantel”.
Las actividades académicas se desarrollaron el martes con total normalidad, pese a la manifestación que se realizó a una cuadra de la institución.
“No es posible que de los 26 docentes, 20 estén en desacuerdo con la gestión de la directiva y se les tacha de problemáticos”.
Fallas de infraestructura
Por su parte, Jessica Nieves denunció que existen fallas graves en el Programa de Alimentación Escolar y la infraestructura es “un desastre. Allí han encontrado hasta ratas muertas y a la alimentación de los niños no se adapta, a veces desayunan yuca con mantequilla y queso que consideramos no es una dieta acorde a los niños porque incluso sabemos que los menúes los elabora la secretaria, quien nos ofende y nos impidió el ingreso al plantel”.
Además denunciaron que constantemente las cloacas se desbordan, situación que afecta a los más de 500 estudiantes que hacen vida en la escuela.
“Los niños también están afectados desde el punto de vista psicológico porque presencian los insultos que los directivos lanzan a los docentes que han manifestado descontento y ello ocurre en los salones de clases. Los representantes hemos sido testigos de esa situación”, acotaron las madres preocupadas.
“Las ratas acabaron con los útiles escolares de los niños durante las vacaciones de diciembre”, acotó otra representante que mostró fotografías de lo ocurrido, así como otras imágenes que, a su juicio, evidencian las irregularidades internas.
La protesta inició a las 8:00 de la mañana y culminó luego de las 10:00, al sitio también acudieron funcionarios de Polilara para mediar con las representantes.