La cadena perpetua debe implementarse en Venezuela
Fran Tovar
El delincuente usa un arma de fuego, actúa con violencia, ensañamiento, superación física, premeditación, alevosía y ultraje, para quitarle una pensión del Seguro Social a una ancianita. Entonces eso que se llama Código Orgánico Procesal Penal, casi establece que la culpable es la anciana. Así no se puede.
Ese mismo delincuente sale libre al poco tiempo y más adelante en su vertiginosa carrera delictiva asesina tres personas, convicto, confeso y juzgado por los tribunales de justicia, la máxima pena que puede recibir es de 30 años, si el asesino tiene 18 años y lo meten en una de las cárceles venezolanas (más parecidas a un resort), estudiará, tendrá derecho a visitas conyugales, podrá asistir a fiestas y no trabajará porque si lo hace le estarían violando sus derechos humanos. Eso sí, a los 15 ó 20 años de haber, cuando haya cumplido, parte de la pena, tendrá entre 33 ó 38 años de edad y estará en la calle libre y gozando de eso que llaman beneficios procesales, para seguramente seguir cometiendo otros delitos. Hay casos que no tienen arreglo. Es la cruel realidad.
A medida que las sociedades se desarrollan, avanzan para mal y para bien, por lo que deben crearse mecanismos que permitan a la sociedad protegerse de los delincuentes y una de esas formas de protegerse es crear la cadena perpetua para crímenes horrendos.
Debe enviarse un mensaje para que exista el miedo. Hay que hacerle entender a los seres humanos que los años de prisión van de acuerdo al delito cometido. No es lo mismo una estafa menor, un arrebatón de cartera, que una violación con asesinato. El primero tiene arreglo, el segundo no. Además a esos enemigos de la cadena perpetua les tengo la siguiente situación: Un maestro de kínder es acusado y condenado por pedófilo, según los enemigos de la cadena perpetua él podría seguir dando clases después del cumplimiento de su condena. Qué les parece.
No se trata de ser más radical, se trata de que algunos delitos son demasiados atroces y no puede ser que el mensaje al delincuente sea: tranquilo que lo máximo que te pueden meter de prisión son 30 años.
En Casalta III un sector popular de Caracas, la gente aplaude la búsqueda del sádico-asesino implementada por el movimiento Los Tupamaros, eso no pude ser, el único con derecho a utilizar la violencia y la justicia son los representantes del Estado, en este caso la policía y los tribunales de justicia. La gente no puede estar aplicando la justicia por su propia mano, esas situaciones se saben cómo comienzan, pero nunca se sabe cómo terminan.
Si las instituciones de Estado, los políticos, los luchadores sociales y en especial la Asamblea Nacional no actúan en consecuencia para buscar las alternativas que permita contener la delincuencia, la sociedad actuara por su cuenta y estarán convocando a la disolución del país.