Tres denuncias formales se habían recibido en el Cicpc sobre el robo de pertenencias de personas y de vehículos a transeúntes y residentes del Club Hípico Las Trinitarias, al este de la ciudad.
Tres efectivos de Investigaciones Contra el Robo y Hurto de Vehículos comenzaron con las averiguaciones del caso y se instalaron en las adyacencias de los edificios que están cerca de la universidad, pues sabían que los robos eran cometidos en horas picos y en ocasiones los delincuentes aprovechaban la cola que se hace por la espera del cambio de semáforo para actuar.
A las 7 de la noche los sabuesos recibieron las llamadas: los presuntos delincuentes ya estaban por la zona, por lo cual los efectivos se instalaron en el lugar. Los jóvenes comenzaron con su faena diaria, aparentemente robaban descargaban su botín y regresaban. Ya se habían adueñado de dos teléfonos celulares y a eso de las 9 de la noche fueron los efectivos del cuerpo detectivesco quienes le dieron la voz de alto tras sorprenderlos en plena andanzas.
Los malhechores, quienes andaban en una motocicleta blanca, no se detuvieron e hicieron frente a los funcionarios, así lo indicó el comisario Juan Bautista Carmona, jefe del Cicpc Lara.
En medio del intercambio de disparos los sujetos resultaron heridos y trasladados hasta la emergencia del Hospital Central en donde posteriormente fallecieron.
Los abatidos son residentes de El Jebe. Conducía la motocicleta Rubén Darío Moreno Vizcaya (22) quien tenía en su poder un revólver calibre 38 con los seriales limados y el parrillero era José Antonio Ladino Palacio (25), quien portaba una pistola calibre 9 milímetros con los seriales en las mismas condiciones.
El jefe policial manifestó que vecinos de la zona, al llegar al lugar, comenzaron a señalarlos como autores de varios asaltos, por lo cual, en el momento, se contabilizaron más de siete víctimas.
Carmona indicó que las investigaciones apenas comienzan porque se trata de una banda que tiene aproximadamente un mes operando por la zona.
Si bien los sujetos que fueron abatidos por la comisión del cuerpo detectivesco no tienen antecedente alguno, se asocian con una organización delictiva denominada “Los Cangris” dedicada al robo y hurto de vehículos que opera por toda la zona del este de la ciudad.