Arborización y paisajismo
A través de los años hemos observado cómo se malgasta el dinero de los ciudadanos en programas de arborización y paisajismo desacertados, que no subsisten en el tiempo; se corrobora con esta afirmación el hecho de que no existe en toda la ciudad una obra digna de citarse como tal.
Uno de los factores que contribuye a fracasar radica en el desacierto de la selección del material vegetativo que conformaran dichos programas. Se apunta a escoger especies atractivas por su apariencia, asignándole a este factor la importancia decisoria, no tomando en cuenta las exigencias de estas en cuanto a sus demandas.
De importancia vital es el factor exigencia de riego, por cuanto se sabe lo que el agua representa para la planta, para realizar la fotosíntesis, proceso esencial para la subsistencia de la planta y proveer de oxigeno y alimentos al ser humano y animal.
Es de conocimiento general que existen plantas más exigentes en demanda de agua que otras, lo cual representa una oportunidad para el hombre y de esta manera hacer uso adecuado de las diferentes especies que la naturaleza le ofrece y obtener de ellas los innumerables beneficios que nos brindan.
Otro factor que ha de tomarse en cuenta es la poda. Existen especies más exigentes en esta actividad que otras, incidiendo esto en demanda de mano de obra.
De igual manera ha de tener en cuenta que las expuestas en ambientes de exteriores, esto es, en áreas públicas, las plantas, son sometidas a mal trato por parte del público inconsciente de la importancia que representan para el ser humano. En este orden, los organismos con injerencia en los programas ambientales deberían diseñar campañas publicitarias instando a la ciudadanía a cuidar las diferentes especies plantadas en los espacios públicos, ya que estas obras son en beneficio del ser humano.
En áreas donde hay oportunidad de instalar sistema de riego permanente se debe supervisar cuidadosamente la eficiencia en su funcionamiento, pues con frecuencia se observa que quedan áreas no cubiertas por el riego, lo que trae como consecuencia la pérdida del material vegetativo plantado.
En áreas donde no exista la posibilidad de instalar sistema de riego, dicha labor debe ser asignada a camiones cisterna, actividad que debe ser supervisada con rigurosidad, ya que se observa incumplimiento en su ejecución.
Cuando se ejecuta una labor de cualquier índole, las personas del entorno lo toman como algo extraño a ellos. Cuando se involucra a la población en esas acciones, la gente lo toma como propio y se convierte en su defensor. En obras de paisajismo, por tratarse de seres vivientes, adquiere mayor importancia la actividad vecinal, parte del programa debe consistir en detectar personas proclives al paisajismo. En las asociaciones vecinales deben formar parte personas con inclinación hacia estas actividades, a fin de guiar al resto de la comunidad a diligenciar ante los organismos competentes la ejecución de programas de plantación. Es de hacer notar que en el ámbito de la empresa privada existen algunas con inclinación a colaborar en dichas actividades.