El Gobierno de Colombia está preocupado porque la devaluación de la moneda venezolana puede empujar más el contrabando al otro lado de su frontera, incrementado el flujo de mercancías que ingresan ilegalmente desde el vecino país, dijo el martes el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas.
«No podemos dejar que a raíz de la devaluación en Venezuela se nos inunde el mercado colombiano de contrabando», aseguró el funcionario en declaraciones a Caracol radio.
Venezuela devaluó la semana pasada su moneda, el bolívar , en un 32 por ciento, la quinta que realiza el país petrolero en una década, con lo que las exportaciones venezolanas se hacen más baratas para los clientes extranjeros.
Una amplia gama de controles a los precios de los bienes de consumo venezolanos impulsó previamente el contrabando de combustible, carne y electrodomésticos en la zona fronteriza binacional, en donde eran más baratos que los productos colombianos.
La devaluación hará que el contrabando incluso sea más barato en pesos colombianos.
La devaluación, que entrará en vigor el miércoles, fue anunciada el viernes antes de un largo fin de semana con dos días feriados en Venezuela, lo cual permitiría reducir al mínimo las repercusiones políticas y de mercado.
Las tensiones entre Colombia y su vecina Venezuela han disminuido considerablemente desde que el presidente Juan Manuel Santos asumió la presidencia en agosto del 2010 y recompuso las relaciones con el mandatario izquierdista Hugo Chávez.
El buen ánimo impulsó el comercio transfronterizo, que venía de un desplome cuando el líder venezolano rompió relaciones con Colombia en el 2008.
Excluyendo el contrabando, Colombia tuvo un superávit comercial con Venezuela de alrededor de 2.000 millones entre enero y noviembre del año pasado, de acuerdo con los datos más recientes, desde los 1.200 millones de dólares en todo el 2011 y 1.100 millones de dólares en el 2010.