Lo que ocurre en El Patriotra, caserío perteneciente a la parroquia Tintorero, es difícil de creer: hace más de veinte años, durante la gestión de José Mariano Navarro como gobernador, instalaron las tuberías para lo que sería el acueducto que vendría a resolver el grave problema de la falta de agua que pade-cían sus habitantes.
Aunque resulte imposible de creer, transcurridos más de veinte años, las familias de El Patriota siguen sin recibir una gota de agua por esas tuberías que cruzan el poblado.
Hasta ahora sólo reciben el líquido vital cuando se las llevan en camiones cisternas de la Alcaldía de Jiménez.
“Ellos quedaron de mandarnos los cisternas cada veinte días, pero hoy tenemos casi tres meses sin recibirlos, lo cual significa que todas las familias nos estamos muriendo de sed”, dijo Fredy Rivero, uno de sus habitantes.
Para reclamar el cumplimiento de ese compromiso un grupo de familias de El Patriota y otros sectores vecinos como Las Veritas y La Falda cerraron la carretera a primera hora de la mañana de este martes, exigiendo la presencia de alguien de la alcaldía.
“Estábamos dispuestos a mantenerla cerrada por varias horas pero llegó el encargado del agua por la alcaldía y se comprometió a normalizar la situación y la abrimos”, explicó Lisandro Alvarado, de Las Veritas.
Pero amenazaron con cerrar nuevamente la vía si incumplen el acuerdo pues no tienen agua ni para preparar los alimentos.
Carlos Rivero, otro habitante, manifestó que existen algunos pozos particulares pero sólo producen agua salada no apta para el consumo humano.
“Aquí los chivos y hasta las pobres iguanas se están muriendo de sed y no hay quien se apiade de nosotros”, expresó por su parte Altagracia Rivero, también residente.
Los vecinos mostraron los tanques, azules y de concreto, completamente vacíos, porque desde hace tiempo no son llenados por los cisternas de la Alcaldía.
En Las Veritas tienen un camión tanque con el cual venían abasteciéndose pero se accidentó y carecen de recursos para repararlo, y a pesar de que lo habían ofrecido a la Alcaldía para colaborar con otras comunidades, no reciben ayuda oficial.
Juvenal Alvarado Rodríguez, uno de los viejos habitantes de El Patriota, considera que no hay razón para que los gobiernos, municipal y regional, les tengan tan abandonados en cuanto a un servicio público tan indispensable como el del agua.
“Este pueblo tiene unos 300 años de fundado y ya debería tener un acueducto. No sé qué están esperando para construirlo porque la población existe para merecerlo”, expresó Alvarado.
Otros habitantes hicieron un llamado al gobernador Henri Falcón para que gire instrucciones con el fin de que se le construya un acueducto a El Patriota, o al menos una caja de agua en alguno de los cerros inmediatos y así recibir el líquido por gravedad.
Pero también en El Patriota siguen esperando la instalación de al menos un puesto de la Policía de Lara o de la Guardia Nacional desde el cual se le brinde seguridad, no sólo a los habitantes de ese caserío sino también a Las Veritas, La Falta y toda esa zona al norte de Tintorero.
Recuerdan que de allí salen hamacas y otras piezas de artesanía, además de hortalizas como tomate, pimentón y cebolla que son distribuidos en todo el país y los productores necesitan seguridad.
Fotos: Luis Salazar