Lamentablemente, en Venezuela no hay una política criminal, de la cual es parte la rama penitenciaria, sostiene el Dr. Alberto Arteaga, conocido abogado penalista, quien fue entrevistado -vía telefónica- por reporteros de EL IMPULSO.
La política criminal, explica, tiene que ver con prevención, represión en el buen sentido de la palabra -que comprende persecusió y juzgamiento de los delitos- y, como última etapa, la fase penitenciaria, la cual tiene que ver con el cumpllimiento de las sanciones impuestas por los tribunales.
-En ese sentido, ¿cómo explica lo que ha ocurrido en la cárcel de Uribana?
-No existen palabras para describir lo que ha sucedido en ese centro de reclusión, donde en una medida de requisa se han producido 57 ó 58 muertes, según las cifras conocidas hasta los momentos y unos 80 heridos. Es grave, gravísmo, lo que ha ocurrido en este y en los otros llamados establecimientos penitenciarios, como El Rodeo, pero que no son otra cosa que antros penitenciarios. Es la expresión del fracaso rotundo de todo intento de política penitenciaria.
-Pero, ¿es que ha faltado estudios para aplicar esa política?
-Los diagnósticos están hechos desde hace tiempo -veinte, diez años-, por supuesto, cuando el problema no era tan grave como el que tenemos actualmente. Porque, evidentemente, al no tomar medidas efectivas en materia penintenciaria, el problema ha ido adquiriendo las características que tiene hoy día.
-¿Se refiere a las actividades deplegadas por las mafias?
-La propia ministra lo decía en las declaraciones del domingo: las mafias son las que se imponen en los establecimientos penitenciarios. Son los pranes los que, en definitiva, mandan. No es el Estado, que debe ser garante de quienes se encuentran recluidos en esos centros. Ha resultado incapaz de atender y resguardar el mínimo orden en el sistema penitenciario.
Es gravísimo lo que está ocurriendo, insiste. Siempre he pensado y lo he dicho: mientras no se resuelva el problema penitenciario no podemos decir que en Venezuela se respetan los derechos humanos.
Hay que recordar una frase muy buena de Nelson Mandela, quien dijo que no se puede juzgar una nación por la manera en que trata a sus ciudadanos más ilustres sino porque dispensa a lo que son los presos.
-Ahora que vemos esta realidad tan cruel de muertes día a día en las cárceles y de repente más de 50 fallecidos en una requisa, ¿cómo resolver el drama penitenciario?
-Claro que no se resuelve de la noche a la mañana. El problema es de vieja data; pero, no se ha tomado ninguna medida efectiva para resolverlo. Los lineamientos de la política penitenciaria no son otros que los contenidos en el artículo 272 de la Constitución. Esto hay que decirlo de manera muy clara. Descentralización, personal civil peninteciario especializado, los funcionarios militares deben estar fuera de las prisiones. Lo que se debe buscar es la rehabilitación de los internos.
Foto: Luis Salazar/Archivo
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