Este sábado en la mañana, se desarrolló el sorteo del Bono Arquidiocesano, organizado por la Iglesia Católica local, con el propósito de reunir fondos económicos para las parroquias y vicarías, además de solventar otras necesidades que competen al clero.
Monseñor Antonio López Castillo, arzobispo de Barquisimeto, agradeció en primer lugar a Dios por haber iluminado con la idea de ofrecer los cartones que, además de ser una ayuda representativa para la Iglesia, premia a los feligreses con más de 60 obsequios.
Seguidamente, agradeció por los sacerdotes y diáconos que junto a las comunidades de laicos, se esmeraron en promocionar los bonos entre sus familiares y amigos, movidos por la solidaridad que caracteriza a los cristianos, y también para acumular fondos para cada uno de sus templos.
A la Pastoral de Medios de Comunciación, presidida por el padre Alexander Nieves, así como al resto de medios de comunicación, expresó gratitud por la disposición en anunciar la actividad pro-fondo que se evidenció en cada boleto o cartón con la figura de la Divina Pastora, patrona de los larenses.
“Nos llena de gozo, la demostración de solidaridad de nuestra Iglesia. El bono obtuvo gran receptividad entre los fieles católicos, especialmente, entre los devotos de la Divina Pastora. Dios les recompensará mucho más porque no es la cantidad ofrecida, es el corazón abierto a dar lo mejor para el Señor de Señores”, sostuvo.
30.000 bonos
Un aproximado de 30.000 bonos fueron vendidos por la Arquidiócesis de Barquisimeto, a través de las parroquias y vicarías. Del monto recaudado, un procentaje es para la curia que a su vez socorre al seminario y sacerdotes enfermos, entre otras responsabilidades, y; el resto del procentaje es para cada uno de los templos que colaboraron con las ventas.
Es el autofinanciamiento que venían haciendo desde hace varios años atrás, sólo que lo hacían mediante la Colecta Arquidiocesana que ocurría cada 14 de enero con la procesión de la Divina Pastora. ¿Cuáles son las necesidades del seminario? Entre las más importantes el sustento de los jóvenes seminaristas.
La alimentación de los futuros sacerdotes, gastos operativos de las instalaciones del seminario Divina Pastora, es muy alto, razón por la cual resulta más que valiosa la generosidad demostrada con los bonos. Asimismo, es últil el aporte de cada cristiano para mejorar la seguridad social de los sacerdotes. Aunque cuentan con un seguro de hospitalización, no es suficiente para de pronto atender emergencias o enfermedades delicadas que ameritan inversiones multimillonarias.
Es una manera, explicó el sacerdote Omar Gutiérrez, directivo de Cáritas Venezuela, de dignificar la vida consagrada, con el único interés de respetar los derechos humanos de cada servidor, en este caso sacerdote o religiosa, especialmente, en los momentos de enfermedad.
El sacerdote Gutiérrez manifestó que, además de las misiones que emprenden en los diferentes estados de Venezuela, donde la Arquidiócesis debe costear algunos o todos los gastos, se deben promover a quienes van a otro país para culminar los estudios vinculados a la vocación sacerdotal; sin olvidar el trabajo incansable que realizan las parroquias y/o vicarías más humildes de la localidad, en las cuales el esfuerzo de los laicos ha sido la única ayuda para construir o ampliar los templos.
Fotos: Jairo Nieto
