El estadio José Bernardo Pérez de Valencia es el escenario del primer enfrentamiento entre Cardenales de Lara y Navegantes del Magallanes en la final de la LVBP. Será el tercer choque entre ambos en instancias decisivas, con un triunfo para cada equipo.
Cardenales busca el quinto título de su historia, el primero desde la temporada 2000-2001. Es la primera final desde la campaña 2007-2008, cuando los pájaros rojos fueron superados en seis compromisos por los Tigres de Aragua.
Lara, de la mano del estratega Pedro Grifol y una nómina plagada de talento, busca volver al plano estelar en la pelota rentada nacional.
La situación de Magallanes no es muy diferente; el equipo turco no celebra un título desde la zafra 2001-2002, cuando derrotaron a los Tigres de Aragua.
Cardenales fue el equipo más ofensivo del round robin y la llegada de Ernesto Mejía le da más fortaleza a un lineup que va a dar dolores de cabeza a los lanzadores rivales.
De hecho, la ofensiva crepuscular culminó con los tres mejores bateadores de la ronda semifinal -CJ Retherford (.355), Luis Valbuena (.354) y Luis Jiménez (.352)-.
Robert Pérez fue el líder en cuadrangulares con cinco estacazos de cuatro esquinas, seguido por el propio Retherford, además de los magallaneros Eliézer Alfonzo y Pablo Sandoval, todos con cuatro bambinazos.
Además, Cardenales tuvo al líder remolcador del round robin en Luis Valbuena, quien produjo 17 carreras en 16 compromisos. A toda esa producción se suma el Jugador Más Valioso de la temporada regular (Mejía), quien será el cuarto bate de la alineación, según lo anunciado por el mánager Pedro Grifol.
Magallanes, por su parte, busca su undécimo título en Venezuela, con Luis Sojo al mando del timón. Los turcos culminaron en el primer lugar de la campaña regular y sellaron su pase a la instancia decisiva, también con el primer puesto de la tabla.
La gerencia turca blindó la rotación con la escogencia de Austin Bibens-Dirkx, quien se une a CarlosZambrano y Gustavo Chacín, como los pilares del cuerpo de abridores.
En el costado ofensivo, Magallanes también es un equipo de temer. Pablo Sandoval y Elvis Andrus, como segundo y tercer bate de la alineación, basta para sacar cuentas; sin dejar de lado a Juan Rivera, Eliézer Alfonzo y Endy Chávez, además de Héctor Giménez, quien cubrirá la baja de Ramón Hernández en la inicial.
Es una final de pronóstico reservado, con dos equipos que tienen algo en común: grandes ofensivas, capaces de imponerse sobre cualquier lanzador.
Este miércoles a las 7.30 de la noche se escuchará la voz de play ball en el José Bernardo Pérez de Valencia, hogar de los Navegantes, cuando estos dos equipos inicien su carrera final, al mejor de siete juegos, para ver quién se lleva el cetro de la temporada 2012-2013.
Será la tercera vez en la historia de la liga que ambos equipos se enfrenten en la instancia decisiva, la primera fue en la campaña de 1995-1996, con victoria para los Magallanes en siete encuentros, y la segunda en la temporada de 2000-2001, con triunfo de Cardenales en seis juegos.
El duelo
Ken Ray, por Cardenales, y Carlos Zambrano, por Magallanes, serán los encargados de abrir el primer duelo de la final.
El estadounidense se unió a los pájaros rojos en el round robin, proveniente de Tigres de Aragua, luego de ser adquirido en el draft de sustituciones. Sin embargo, en sus dos primeras aperturas, precisamente contra Magallanes, no tuvo buenas actuaciones. En la primera fue castigado con cuatro carreras limpias en 2.2 innings de labor, incluidos cuatro hits -dos cuadrangulares-, tres pasaportes y dos ponches.
Luego, en su segundo choque ante los eléctricos, el oriundo de Atlanta toleró tres rayitas en 4.1 tramos, aunque solo una de ellas fue limpia.
El norteamericano fue de menos a más y en sus dos últimas salidas superó las cinco entradas, incluso, cerró con una gran actuación frente a Leones del Caracas en Barquisimeto. En total lanzó cuatro juegos, culminó con registro de un triunfo y una derrota, y tuvo efectividad de 4.91.
Por su parte, Zambrano, también tuvo par de presentaciones contra Cardenales en el round robin.
Enfrentó precisamente a Ray en las dos oportunidades y no le fue del todo bien. Primero fue vapuleado con cinco carreras -una sucia- en 3.2 actos, con línea de cuatro boletos y tres ponches.Luego, mejoró y se fue sin decisión, con seis innings y dos carreras limpias.
Zambrano viene de cumplir su mejor actuación frente a Caribes de Anzoátegui, el pasado 17 de enero, duelo en el que coqueteó con el no hit no run. Al final toleró dos inatrapables en 8.2 episodios.
La escena está servida y los dos equipos listos para una ardua batalla en el diamante. Ofensiva contra ofensiva, Grifol contra Sojo, Ray contra Zambrano es el escenario que se plantea en este primer asalto.
Foto: Daniel Báez / Archivo
