Cuando hace poco más de cuatro años fue construida la urbanización Reinaldo Bravo, al este de la capital del municipio Crespo, las familias beneficiadas con las casas pensaron que iban a disfrutar de todos los servicios y por ende de dignidad.
Muchas ocuparon viviendas aún sin terminar pues llevaban tiempo esperando “arrimadas” en casas de familiares o pagando alquileres a pesar de carecer de recursos económicos para ello.
Pero, a excepción de las viviendas, en la urbanización Reinaldo Bravo no han hecho nada más. Ni siquiera de calles disponen pues lo que llaman así son apenas caminos, algunos por los cuales no se puede transitar.
Alberto Arenas, uno de los vecinos, preocupado por ello, dijo que han recurrido a la alcaldía para que le asfalten las calles pero no han logrado nada y en temporada de verano, como la actual, las mismas son un polvorín y en invierno inmensos barriales.
Hasta ahora, pese a los ruegos, ni siquiera han construido un metro de aceras.
En la urbanización tampoco han tenido nunca agua directa y si algunas familias disponen de tan indispensable elemento es porque, por cuenta propia, han hecho instalaciones con mangueras desde una distante tuberías, aunque tampoco les llega constantemente.
Los vecinos aspiran a que Hidrolara convierta en realidad las obras anunciadas a mediados del año pasado, según las cuales iban a recibir agua procedente del tanque Negro Primero, construido hace unos cuantos años y el cual no ha recibido una sola gota, ni siquiera de lluvia.
Aunque saben de las penurias que pasan las familias para conseguir dónde vivir, les preocupa que sigan construyendo casas en la urbanización Reinaldo Bravo sin haber resuelto los problemas que por falta de servicios públicos siguen confrontando los primeros residentes.
También están exigiendo que, al menos de vez en cuando, vean una patrulla de la policía para alejar a los elementos de mal vivir que pretenden acabar con la paz relativa de quienes allí residen.
“Este es un problema serio que debe ser resuelto por la Alcaldía y la Gobernación, para que estas familias puedan tener una vida digna y no con dificultades como las que ahora confrontan”, dijo por su parte Asdrúbal Álvarez, del movimiento Crespo Activo.
Agregó que la falta de agua es un problema serio que afecta a la mayor parte de los habitantes de toda la ciudad y hasta ahora no se han visto acciones concretas, sólo anuncios o promesas por parte de voceros de la gobernación o de la alcaldía de Crespo.
Considera que una vez terminadas las campañas electorales del año pasado, cuando esos funcionarios andaban buscando votos en las barriadas, ahora deben preocuparse por convertir en realidad aquellas promesas, entre ellas las relativas al suministro de agua, el más grave de los problemas.
Fotos: Luis Salazar