Pensar
Migraciones, remesas y refugiados. El número total de migrantes internacionales ha aumentado en los últimos diez años y ha pasado de 150 millones en 2000 a 214 millones en 2010. 3.1% de la población mundial está constituido por migrantes. El porcentaje de migrantes varía enormemente de un país a otro. Entre los países que cuentan con un alto porcentaje de migrantes, cabe señalar Qatar (87%), Emiratos Árabes Unidos (70%), Jordania (46%), Singapur (41%), y Arabia Saudita (28%). Entre los países con un bajo porcentaje de migrantes, cabe señalar: Sudáfrica (3,7%), Eslovaquia (2,4%), Turquía (1,9%), Japón (1,7%), Nigeria (0,7%), Rumania (0,6%), India (0,4%) e Indonesia (0,1%). Por ejemplo, la población inmigrante en Estados Unidos para el año 2008 ascendía a 38 millones de inmigrantes, lo que representa el 12.5 % del total de la población, distribuidos 30.1% mexicanos; 4.4% filipinos; 4.3% indúes; 3.6% chinos.
Las remesas que se estima enviaron los migrantes han aumentado exponencialmente: de 132.000 millones en 2000, han alcanzado unos 440.000 millones de dólares en 2010, y ello a pesar de registrar una ligera disminución debido a la crisis económica vigente. Todo parece indicar que el importe real, incluidos los flujos no registrados, enviados a través de vías oficiales y oficiosas, es considerablemente superior. En 2010, los principales países beneficiarios de remesas fueron la India, China, México, Filipinas y Francia. Los países ricos son la principal fuente de remesas. Los Estados Unidos de América es el primero con gran ventaja, ya que registra 48.300 millones de dólares de remesas enviadas en 2009. La Arabia Saudita es el segundo país con mayores envíos, seguido por Suiza y la Federación de Rusia. (http://www.iom.int/jahia/Jahia/facts-and-figures/lang/es)
Casi 30 millones de personas viven desplazados por conflictos bélicos, la mitad de ellos en países como Colombia, Sudán, República Democrática del Congo, Somalia, Palestina, Afganistán e Irak La cantidad de desplazados internos ha aumentado, pasando de 21 millones en 2000 a 27,5 millones a finales de 2010. El número de refugiados fue de 15,4 millones en el 2010 (http://www.publications.iom.int).
Crisis Ecológica. Solo en el siglo XX el desarrollismo mundial derrochó casi 100.000 veces la energía consumida por los seres humanos desde el principio de la humanidad, hace unos 200 mil años. La producción industrial mundial se multiplicara por más de 50 veces en el siglo XX. A principios de siglo las personas que vivían en ciudades era del 15%, en la actualidad supera el 70%. Mientras la población mundial se multiplicaba por 4 y el número de metrópolis por 40.
Hace un siglo la concentración de CO2 era de 280 ppm y en la actualidad con toda la quema de combustibles fósiles y tala de árboles la concentración ha subido a 385 ppm. Esto significa que en esos 100 años la acción humana ha logrado sacar los niveles de concentración de CO2 fuera del rango que la naturaleza mantuvo por 650 mil y quizás 20 millones de años (180 a 280 ppm.) y los ha incrementado en una magnitud similar (de 280 a 385 ppm) a la que antes marcaba una diferencia entre edad de hielo y clima “normal” (de 180 a 280 ppm). Además, lo ha hecho a una velocidad casi mil veces mayor, ya que la mayor parte de este incremento se ha dado en los últimos 50 años, mientras antes a la naturaleza, sin la presencia humana, le tomaba 50 mil años incrementar 100 ppm.
Mundialmente se emiten 5.500 toneladas de dióxido de carbono (CO2) al año como producto del uso de combustibles fósiles. Este gas queda atrapado en la atmósfera, causando el efecto invernadero que se manifiesta en un calentamiento global del planeta. Cada año se emiten a la atmósfera 1 tonelada de cloro-flúor-carbonos (CFC) como producto de procesos industriales. Estos gases inertes tienen un tiempo de permanencia en la atmósfera de 100 años y son los responsables de la destrucción de la capa de ozono que nos protege de los rayos ultravioletas del sol.
Como resultado de la guerra fría hoy quedan en Rusia un total de 43.200 toneladas de armamentos químicos. Algunas de estas substancias han sido almacenadas en recipientes no apropiados y escapan al ambiente, otros no se sabe donde quedaron almacenados, convirtiéndose en una amenaza ambiental y terrorista. Estados Unidos tiene acumulado 175.000 metros cúbicos de desechos radiactivos que han sido enterrados en minas de sal en Carlsbad, Nueva México. Otras miles de toneladas de material radiactivo procedente de reactores nucleares y de plantas de producción de armas atómicas, no han encontrado un sitio seguro para su almacenamiento. (http://www.wrm.org.uy/plantaciones/material/carbono.html). FIN.