Durante una visita ayer al Mercado de Mayoristas de Barquisimeto (Mercabar), algunos comerciantes reportaron causas distintas a las expresadas por el gobierno nacional en torno a la escasez de productos alimenticios, y reportadas tras el inicio de los operativos de fiscalización de Indepabis y la Guardia Nacional Bolivariana en todo el país.
Un administrador de uno de los galpones en Mercabar, sobre cuyo negocio circuló información en varios medios de comunicación regionales y quien prefirió reservar su identidad, aseveró que sí hay harina, azúcar y arroz, y que una de las principales causas de la supuesta escasez es que las guías de transporte de alimentos de las empresas productoras a los distribuidores comerciales mayoristas, no están siendo aprobadas por la Superintendencia Nacional de Silos, Almacenes y Depósitos Agrícolas (SADA).
Igualmente indicó que la semana pasada había tenido lugar una reunión con Asoportuguesa, a la que habría asistido la Directora Nacional del SADA, quien, según el comerciante, habría informado que el despacho a los mayoristas quedaba prohibido. Asimismo, en ese encuentro se habría indicado que sólo se transportarían 150 multos de harina o arroz a cada abasto y supermercado. “La mayoría de Mercabar sólo está comerciando jabón y granos”, enfatizó.
Por otra parte, el comerciante aprovechó para desmentir que en su establecimiento se estuviera acaparando azúcar, y explicó que él debía incorporarse de sus vacaciones el 15 de enero, fecha en la cual se llevó a cabo una venta supervisada de 30 toneladas de azúcar que habían arribado a su galpón cuatro días antes. “Para considerarse acaparamiento, tendrían que haber pasado siete días desde la llegada del producto”, insistió.
“Recibí el azúcar el 7 de enero, y funcionarios del Cicpc se presentaron el 10 de enero, solicitando que se abriera el galpón. Los organismos a los cuales les compete el procedimiento de fiscalización son Indepabis y la GNB, y yo tuve que llamarlos”, expresó el administrador del establecimiento, donde se constató que los únicos productos que permanecían en su depósito eran caraotas y semillas de girasol.
También se conversó con Narbys Vargas, quien gestiona la Asociación Cooperativa Misión Nueva Venezuela, ubicada en el galpón 8B-5, a quien se le consultó cuáles de los productos estaban escaseando más y, en consecuencia, afectando las reservas alimenticias. Su respuesta fue “todos”, tras lo cual explicó que la mayoría de los galpones en Mercabar no cuentan con los códigos necesarios para que arriben allí los alimentos de las principales empresas productoras. “En nuestro caso, no nos llegan productos de la Polar”, dijo.
En cuanto al proceso de fiscalización que se realiza en todo el país, indicó que en su caso, los funcionarios han venido simplemente a chequear los precios, aclarando que “en realidad varios comerciantes deben vender los productos por debajo de cuerda, ya que las guías del SADA tardan entre dos o tres días en obtenerse. Aquí vienen compradores tanto nacionales, como internacionales, y sería bueno que se abordara el problema del retraso en el otorgamiento de guías. Es un proceso que sólo debería tomar un par de horas”.
Fotos: Jairo Nieto