El jardinero central brasileño, Paulo Orlando, vive un buen momento con el madero después de conectar cuatro imparables el martes contra Caribes de Anzoátegui, cuando fue colocado ubicado como segundo bateador en el orden del line up del mánager Pedro Grifol.
Orlando estuvo desde finales de la campaña regular y parte del round robin como sexto en la ofensiva, motivado a los problemas que habían presentado los bates crepusculares en la parte baja del line up.
“Me siento cómodo en ese puesto, trato de embasarme para que los bates del medio nos traiganen carrera. Es necesario
seguir dando esas conexiones y ayudar al equipo que es lo importante”, aseguró el guardabosque.
El jugador ha trabajado con los pitcheos quebrados, los cuales le han hecho daño en el cajón de bateo. “Hago ajustes, me han lanzado muchos pitcheos rompientes.
Los técnicos me han ayudado para mejorar esa situación. Batear del medio hacia la parte derecha del terreno me ha traído buenos resultados para dar imparables”, relató el brasileño.