Ante el reciente proceso de fiscalización iniciado en todo el país por la Guardia Nacional Bolivariana e Indepabis, ayer se realizó un recorrido por algunos de los principales mercados municipales de Barquisimeto para verificar la escasez de productos básicos.
En efecto, al llegar al mercado San Juan, fue posible percatarse de la notable ausencia de la carne de las vitrinas refrigeradas en los 35 puestos que allí se dedican a la venta de este alimento.
Algunos carniceros expresaron, sin revelar sus nombres, que están trabajando a riesgo, pues los productores les venden el kilo de carne en canal, es decir, recién sacada del matadero sin deshuesar, a 34 bolívares. Esto a pesar de que los entes reguladores, quienes aún no pasan por allí, les exigen a los venderores que la expendan a 24 bolívares en los casos del solomo de cuerito, el lomito y la punta trasera.
En el mercado Terepaima, a donde sí ha ido la GNB, se notó mayor disponibilidad de productos cárnicos, aunque los vendedores objetaron opinar al respecto. Sin embargo, una compradora, Alicia Colinas, expresó que la iniciativa de fiscalización sí había surtido efecto.
“La semana pasada el solomo de cuerito lo vendían a 80 bolívares el kilo, y el pollo a 90, al tiempo que estaban muy escasos la harina, el azúcar y el café. Pero tras el operativo, ya han empezado a aparecer nuevamente en los anaqueles de algunos supermercados y los cárnicos bajaron de precio en el mercado Terepaima”, comentó.
También se visitó un comercio en la avenida 20. Jhonny Vásquez, asesor jurídico del establecimiento, informó que la harina de maíz, la pasta, el arroz, el azúcar y el aceite regulado aún son muy escasos, y que la GNB había registrado en el lugar la falta de éstos y otros alimentos, al tiempo que indagaron sobre la rotación de los mismos. “Una gandola con 1.400 bultos de harina no dura un día, a razón de tres paquetes por persona. Para estar al día con este producto, necesitaríamos 4 ó 5 gandolas por semana, en lugar de una”, aclaró.
Fotos: Jairo Nieto