“Apareció en el cielo una señal grandiosa: una mujer, vestida de sol, con la luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas sobre su cabeza”, reza el libro de Apocalipsis, capítulo 12, versículo uno, en referencia a la Bienaventurada.
Santa Rosa tiene fiesta en el espíritu. De gozo están llenos los devotos de la Divina Pastora, a sólo horas de la procesión 157 a la ciudad de Barquisimeto, una de las manifestaciones de fe más importantes de Venezuela y de Latinoamérica. Ayer, la Pastora de las Almas lució su traje nuevo confeccionado por las Marías del pueblo: María Leonor Sosa y María de Giménez.
Contemplar el rostro de la Madre, es encontrar la divinidad de Cristo, en la sencillez y ternura que inspira la Reina del Cielo. Allí, a los pies de la Virgen, las oraciones adornaban su presencia inmaculada. Por la salud, bienestar familiar, proyectos profesionales y académicos, entre otras intenciones, fueron puestas a la voluntad de Dios, gracias a la mediación de la llena de gracia.
A las 10.00 de la mañana, fue la eucaristía ofrecida por los cultores del estado Lara, organizada por Concultura, donde estuvo presente el gobernador del estado Lara, Henri Falcón, al igual que otras personalidades de su gabinete y demás fieles.
Desde el arco de Santa Rosa, ubicado en la entrada de la vecina localidad, cantaron y danzaron los diferentes grupos folclóricos de la región. Los Zaragozas, fueron los más llamativos, sin embargo, el resto, casi mil cultores, entre poetas, músicos, golperos, pintores, entre otros, fueron admirados por el lindo homenaje dado a la patrona de los larenses. Carlos Yépez, El Pariente, presidente de Concultura, explicó que por cuarto año consecutivo honraban a la desposada con José.
Reconciliación
Con la visita 157 de la Divina Pastora a la ciudad crepuscular, también es posible ganar el perdón de los pecados. En el santuario de la Excelsa Patrona, hay jornadas de confesión para acercar a los hijos espirituales de María con su Hijo. Reconocer las faltas ante Jesús, es un vínculo seguro para caminar según sus mandatos.
El padre Pablo Fidel González, párroco de Santa Rosa, insiste mucho en el sacramento de la Reconciliación a fin de que las bendiciones obtenidas mediante la manifestación mariana rebosen por completo los corazones, si verdaderamente existe arrepentimiento de las faltas cometidas con el prójimo.
Más de 15 sacerdotes, a lo largo del día, continúan confesando a los devotos que acuden al pueblito católico y así lo vienen haciendo desde el pasado 4 de enero cuando inició la programación especial del templo. Una vez más, el sacerdote exhortó a un espíritu de recogimiento y oración para participar de la procesión. Evitar las bebidas alcohólicas y hechos delictivos, es un gran aporte para agradar a Dios.
Ultiman detalles
Por su parte, la Empresa Municipal de Infraestructura y Conservación del Ambiente (Emica) ultima los detalles para el pueblo de Santa Rosa y el resto de tramos que conforman el recorrido mariano. Resguardar las áreas verdes, fue una de las principales tareas, a fin de no opacar la sana apariencia de la ciudad determinada por la vegetación.
La pintura de bancos, fachadas de las viviendas y templo, así como mantenimiento en la conocida redoma de la Divina Pastora, antes de la intercomunal Barquisimeto-Cabudare, también forman parte de las actividades desarrolladas para recibir a residentes y foráneos.
Fotos: Elías Rodríguez
