Desde las 3 de la tarde y hasta la una de la madrugada de ayer los familiares de los 17 privados de libertad que se encuentran recluidos en la comisaría La Paz, protestaron por los malos tratos a los cuales son sometidos cuando van a visitar a sus seres queridos. Debido a ello quemaron cauchos.
El día de ayer, a las 10 de la mañana, llegó una comisión de la Unidad Criminalística del Ministerio Público para hacer las respectivas inspecciones en el centro de coordinación, según los seres queridos en represalia por la protesta realizada la noche del jueves, los uniformados les pegaron a sus seres queridos, tanto así que a unos los sacaron desmayados.
Nilcia Adans manifiesta que ella tiene a su hijo detenido desde hace dos meses, debe traerle las tres comidas y constantemente, cuando acuden a llevarles sus alimentos o ropa, reciben maltratos. Otros familiares que estaban en las afueras de la comisaría manifiestan que no entienden el por qué los acusan de introducir objetos ilícitos si a ellas las desnudan antes de ver a sus seres queridos y a los privados de libertad los revisan antes de entrar al calabozo.
La noche del jueves la Fiscalía 13 con competencia en Asuntos Penitenciarios estuvo presente, y la mañana de ayer fue el abogado Rubén Ramones, a cargo de la Fiscalía 21 con competencia en Derechos Fundamentales y fueron los que se hicieron cargo de la inspección.
Se conoció que parte del equipo de la Unidad Criminalística inspeccionó el calabozo, tomaron declaraciones a cada uno de los detenidos, así como registros fotográficos, además de hacer la respectiva revisión de los supuestos maltratos y se conoció que se levantó un acta sobre lo ejecutado en la comisaría La Paz.
Fotos: Ángel Zambrano
