El canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, participará en un acto convocado por el gobierno venezolano para este jueves en Caracas, fecha prevista para la nueva asunción del convaleciente mandatario Hugo Chávez, informó este martes el ministro.
«Voy a estar en Caracas, nos ha invitado el gobierno venezolano, ayer recibí una invitación telefónica del vicepresidente Nicolás Maduro para que una delegación ecuatoriana acompañe el evento que se va a realizar el 10 de enero», dijo el canciller a la televisión pública.
Patiño indicó que este miércoles también podría tener lugar en la capital venezolana una reunión de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), bloque regional del que hacen parte Quito y Caracas, aunque no detalló la agenda.
«Posiblemente se hará una reunión del Alba el 9 y tendremos una reunión de representantes de presidentes y funcionarios de América
Latina en este día importante», señaló.
El canciller sostuvo que vive con «preocupación» las noticias alrededor de la salud de Chávez, quien convalece tras una cuarta operación en Cuba del cáncer que padece, y apuntó que «no es la mejor en este momento».
«Está saliendo de una operación muy difícil, como todos lo sabemos, pero tenemos la esperanza de que pueda recuperarse, quisiéramos que se ponga pronto al frente de ese país que le ha ratificado la confianza en las ultimas elecciones», expresó.
Patiño descartó que pueda darse una situación de inestabilidad en Venezuela en caso de que Chávez no pueda asumir el poder este jueves.
«Es difícil pensar que en Venezuela haya intentos de desestabilización que tengan alguna base, porque los resultados de las elecciones son determinantes: el presidente ganó con un margen de 12% y de las 23 gobernaciones el Partido Socialista Unido de Venezuela ganó 20, el triunfo es contundente e inobjetable», subrayó.
El canciller observó, no obstante, que pese a ello la oposición venezolana plantea la posibilidad de convocar a nuevas elecciones «intentando desconocer los resultados de la voluntad popular».
«Pero son juegos pirotécnicos lo que están haciendo algunos sectores allá», dijo, y evocó la reunión que mantuvieron con Chávez él y el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, el 10 de diciembre en La Habana, un día antes de la operación.
«Su ánimo era muy alto, el presidente Correa fue a darle ánimo y al final el presidente Correa dijo que fue Chávez el que le dio ánimo» a él, comentó.
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