Aunque se trata de una zona del este de Barquisimeto, en el pensamiento de muchos sin problemas, la realidad es otra cuando se camina por la urbanización Barici.
Esta comunidad no es distinta a otras del norte o del oeste de la ciudad, porque aunque en menor cantidad, también presenta situaciones que requieren la atención de los organismos gubernamentales.
Uno de los males que aqueja a Barici es el deterioro de las aceras.
Decenas de estos espacios de concreto se encuentran agrietados, mientras pedazos se levantan y quedan desnivelados, haciendo prácticamente imposible que sus habitantes y visitantes se movilicen sobre las mismas, principalmente los niños, personas de la tercera edad y discapacitados en sillas de rueda o andaderas.
Una de las causas del daño de las aceras en muchas calles de este extenso conglomerado son las raíces de los árboles que las rompen, y otro hecho que las afecta frecuentemente son varios botes de aguas blancas que se detectan por filtraciones de las tuberías, cuyo vital líquido corre libremente sobre las calzadas y socavan las bases de estas estructuras.
Esthefani Silva indicó que a propósito de los árboles le hace un llamado a las cuadrillas de Corpoelec Lara, a objeto de que se acerquen a la urbanización y procedan a podar las ramas, ya que muchas de estas rozan el cableado y provocan apagones a cada momento en la zona, pero además temen que se originen cortocircuitos.
Silva recalcó que estos trabajos los debe realizar la empresa eléctrica lo antes posible, puesto que otra de las desventajas cuando se presentan los problemas de luz es el daño que sufren los artefactos eléctricos, principalmente neveras, las cuales de llegar a descomponerse por esta causa Corpoelec no se responsabiliza por reponerlas y entonces las familias deben hacer un gasto fuera del presupuesto cotidiano para comprar estos equipos nuevos, a un costo inflacionario.
La basura sobre las aceras no escapa a esta urbanización, como tampoco los huecos en las calles.
Sobre los desperdicios, Marco Angelis señaló que si bien el servicio de aseo urbano recoge los desechos sólidos con regularidad que se generan en esa comunidad, son algunas personas irresponsables que pasan en vehículos las que lanzan por las ventanillas vasos, bolsas, cajetillas y envases plásticos que se acumulan frente a las casas, atrayendo moscas, ratones y cucarachas.
Angelis lamentó que, según su apreciación, “ni una gota de asfalto de la Alcaldía de Iribarren ha llegado a la urbanización hasta la fecha”.
Es así que varios cráteres hacen difícil la maniobrabilidad del volante a los conductores que se desplazan por Barici, señaló.
Espera que este año que se inicia el municipio tome en cuenta las calles de este sector, dentro del presupuesto para las comunidades.
Las áreas verdes, competencia de la Alcaldía, también necesitan atención en Barici, puntualizó.
Las islas anchas se encuentran desprovistas de grama, y la tierra que poseen se convierten en polvillo que cuando sopla el viento se levanta y entre a las casas.
La inseguridad es otro problema
La inseguridad es un mal que en lugar de disminuir en Barici aumenta desproporcionadamente, en detrimento de los habitantes de esta comunidad.
Amílcar Dorantes expuso que a diario la zona es tomada por sujetos provenientes de sectores cercanos.
“Caminar por Barici se hace con todo el riesgo del mundo, a sabiendas que cualquier delincuente te puede atracar”, dijo.
Afirmó que inclusive bandas conformadas por hasta doce individuos llegan en camionetas lujosas y tras estudiar qué casas están solas porque los ocupantes están trabajando, se introducen en las mismas y se llevan todo lo de valor.
Lamentó que dejar un carro por cierto tiempo frente a una casa mientras se está adentro, al salir ya no lo consigues, o violentan las ventanas y se llevan el reproductor y todo cuanto encuentren.
Dorantes no restó méritos a las rondas de patrullaje que realizan tanto efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana como funcionarios del Cuerpo de Policía de Lara.
Sin embargo, sostuvo, no han sido suficientes ante la cantidad de antisociales que visitan la urbanización.
En este sentido, adujo que las familias se han visto en la necesidad de protegerse con dispositivos de seguridad, tales como cercas eléctricas, reforzamiento de enrejado y cámaras de video.
