La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) realizará del 7 al 11 de enero, la nonagésima novena (XCIX) asamblea plenaria ordinaria, con un itinerario de trabajo que incluye temas propios de la fe católica, pero también los Obispos estarán atentos al desenvolvimiento de la agenda pública nacional, debido a la incertidumbre por la eventual inasistencia del presidente Hugo Chávez a su toma de posesión, el 10 de los corrientes, como consecuencia de un cáncer que le mantiene “delicado” en Cuba.
La convocatoria fue hecha por la directiva de la CEV, entre quienes se encuentran: Monseñor Diego Padrón, Arzobispo de Cumaná y presidente; Monseñor Luis Azuaje, Obispo de El Vigía y primer vicepresidente; Monseñor Mario Moronta, Obispo de San Cristóbal y segundo vice presidente; y Monseñor Jesús González de Zárate, Obispo Auxiliar de Caracas y secretario general.
Panorama Nacional
En relación al “panorama nacional”, no descartan que además de la salud del Jefe de Estado, también los Obispos analicen la petición de libertad para los presos políticos como parte de la reconciliación nacional. Distintas instancias y autoridades de la Iglesia conocen el trabajo que en esta materia ha desarrollado el diputado Edgar Zambrano. “Es positivo y bien visto por la Iglesia y demás sectores del país”, dicen.
Otro tema tiene que ver con el nombramiento, este 5 de enero, de las nuevas autoridades de la Asamblea Nacional, en la que resultó presidente por segunda ocasión, Diosdado Cabello, por sus implicaciones directas con las decisiones del venidero 10 de enero.
Sin embargo explican que el país está dominado por la incertidumbre y la parálisis. “No hay nada claro en la estructura del gobierno nacional. Todo está paralizado; no se sabe nada de los proyectos. La posible inasistencia del presidente Hugo Chávez a su toma de posesión prevista para el 10 de enero, ha generado todo este panorama. En este contexto la Iglesia tiene el deber cristiano y moral de jugar un papel de mediador”, alertan.
Agenda Pastoral Vs. Agenda Política
Las fuentes coinciden en señalar que “se manejó la posibilidad de suspender la asamblea del Episcopado o correrla de fecha debido a la incertidumbre”; sin embargo, “se impuso el criterio de que los aspectos pastorales no deben supeditarse a los políticos”. “Era un error”, admiten.
Algunos temas a tratar por los Obispos en lo atinente a su tarea pastoral, tendrán que ver con la acción evangelizadora de la Iglesia en el país, según se describe en la convocatoria.
“Es importante la convocatoria del Año de la Fe hecho por el Papa Benedicto XVI; la celebración de los 50 años del Concilio Vaticano II que renovó la Iglesia a escala mundial; la participación de Venezuela en Jornada Mundial de la Juventud, que este año se llevará a cabo del 23 al 28 julio, en Río de Janeiro, Brasil; y las Causas de Beatificación, como es el caso del Doctor José Gregorio Hernández. Hay muchas otras, pero estas son ineludibles”.
Resaltan que “para la feligresía y los laicos que integran los movimientos de apostolado, es importante conocer las implicaciones del Año de la Fe y su aplicación en cada diócesis o parroquia. También los proyectos sociales que la Iglesia desarrolla junto a instituciones públicas y privadas”. “Nuestra inserción entre los más pobres se debe fortalecer mucho más”, dicen.
Bienvenida a un nuevo Obispo
Un aspecto de cordialidad se vivirá este lunes 7 cuando los miembros de la Conferencia Episcopal Venezolana, reciban con un aplauso y saludo al nuevo Obispo Auxiliar de Maracaibo, Monseñor Ángel Francisco Caraballo Fermín.
Cabe recordar que el nombramiento se hizo público el 29 de noviembre pasado, cuando la Nunciatura Apostólica en Venezuela dio a conocer esta decisión del Papa Benedicto XVI que llenó un vacío en la Arquidiócesis de Maracaibo.
Esta será parte de la agenda que comienza el lunes 7, a las 9 de la mañana con el saludo de Monseñor Padrón y la salutación del Nuncio Apostólico, Monseñor Pietro Parolín, en la Casa Monseñor Ibarra de la urbanización Montalbán.