Dos nuevos hechos sangrientos han enlutado a más familias en la capital del municipio Morán, donde el azote del hampa no parece dar tregua. El primero de estos crímenes tuvo lugar en la Gallera de Nubia en El Tocuyo, en el que resultó muerto Giosguar José Pérez Pérez (26).
La víctima, quien se desempeñaba como albañil y residía en el barrio Coromoto en la avenida principal de El Tocuyo, recibió varios impactos de bala por parte de un grupo de desconocidos que lo habían abordado mientras se encontraba practicando deporte en una cancha ubicada en la mencionada zona.
El ataque con armas de fuego se produjo cerca de las 8:00 de la noche del pasado viernes. El desafortunado hombre quedó tendido en el lugar y poco después fue trasladado al Hospital Egidio Montesinos en un vehículo particular, allí arribó sin signos de vida. Posteriormente su cuerpo fue trasladado hasta la medicatura forense del Hospital Central Universitario Antonio María Pineda.
El cadáver del joven trabajador fue ingresado a la morgue del Hcamp pasadas las 3:00 de la madrugada de ayer, donde quedó registrado en el libro de entradas que el funcionario del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas que atendió el caso, manifestó que se manejaba la venganza como posible móvil de este homicidio.
Por otra parte, efectivos del Cicpc también manifestaron que la venganza podría haber dado pie a otra muerte violenta que ocurrió detrás del estadio Venancio Pérez en el sector La Lagunita, igualmente en El Tocuyo.
En esta ocasión la víctima fue Eimer Antonio Alvarado Rodríguez (28), quien trabajaba como obrero y habitaba en la misma zona donde le arrebataron la vida poco antes de la 1:00 de la madrugada de este sábado. Al occiso se le encontraron múltiples heridas de bala, por lo que las autoridades consideran que el crimen fue cometido con mucha saña.
Por otra parte, el pasado viernes un menor de 15 años de edad, en la urbanización Egidio Montesinos en Carora, resultó herido cuando jóvenes no identificados ingresaron a las 6:30 de la mañana a la casa de su madre, propinándole dos disparos al estudiante. A pesar de la aparente gravedad de las heridas, los médicos que lo atendieron en el hospital de Carora, descartaron daño de tejido vital.
Igualmente, un habitante del caserío Chairmar Abajo en Quíbor resultó herido cuando unos sujetos intentaron asaltarlo sin éxito, tras haber salido de un banco. Según un allegado de la víctima, el hecho ocurrió a la 1:30 de la tarde del pasado viernes en el callejón 12 entre las calles 20 y 21 en la capital del municipio Jiménez.
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