El cañonazo del 31 de diciembre no ha sonado, y desde el santuario de la Excelsa Patrona, el fervor mariano ya se hace sentir.
A 18 días de la visita 157 de la Divina Pastora a la capital larense, los santarroseños tienen a la mano la lista de peticiones a favor de su calidad de vida y de antemano instan a las autoridades a atender sus verdaderas necesidades.
“Cada vez que están con los preparativos para la Pastora, se dedican a darle al pueblo lo que ellos consideran bonito, pero que para nosotros no es importante.
Necesitamos que urgentemente nos arreglen las calles del pueblo porque casi todas están llenas de huecos o simplemente no tienen asfalto”, dijo Ricardo José García, residente.
En efecto, el programa de actividades de la alcaldía de Iribarren y Gobernación de Lara del periplo mariano 156, dicta:
1-Reparación de brocales
2-Instalación de cestas de basura
3-Sustitución de bombillas en la plazoleta
4-Actividades culturales y eventos musicale
“Viven construyendo vías de acceso pero no terminan de reparar lo que es fundamental, las calles centrales del sector Las casitas.
Santa Rosa no es sólo el santuario, sino su gente y el pueblo que rodea la casa de la Virgen”, agregó García.
Sistema de drenaje
Para 1990 la parroquia Santa Rosa estaba constituida por apenas 53 mil habitantes, según el último censo elaborado por el Instituto Nacional de Estadísticas; veintidós años después, es el hogar de al menos 170 mil nativos.
El pueblo ha crecido en fe, habitantes e infraestructura.
“Lo que antes era una calle desolada, ahora viven una 10 familias. Necesitamos que nos arreglen las calles y que la alcaldía mande a instalar un buen sistema de drenaje porque cuando llueve esto es un desastre.
Esperamos que no se vayan a poner a hacer cosas que para nosotros no son relevantes; si nos quieren ayudar, entonces que hagan lo que pedimos, sino que sigan haciendo sus actividades fuera del pueblo porque aquí no los vamos a estar aplaudiendo”, aseguró María Moreno Pérez, vecina.
En cuanto al tema, el ingeniero Víctor Rivero, coordinador de mantenimiento de drenajes de la Empresa Municipal de Infraestructura y Cuidado del Ambiente (Emica), expresó que el mapa de Iribarren marca zonas rojas donde no es posible la contrucción de desagües. Santa Rosa es una de ellas.
“Es un trabajo sumamente costoso; sin embargo por el lugar hay desagües naturales que hacen la función de desvío de aguas de lluvia”.
En este sentido, los santarroseños piden la intercesión de la Virgen María, para recibir un obsequio municipal verdaderamente útil.
Fotos: Jairo Nieto
