El cáncer pulmonar es conocido por tener el riesgo de muerte más elevado, debido a que los síntomas suelen aparecer cuando la enfermedad ya ha progresado considerablemente y las posibilidades de cura no son tan altas. Este se divide en IV estados, siendo el primero el más leve y el IV el más avanzado. El doctor Chiapori, oncólogo del Moffit Cancer Center de Tampa, Florida explicó que en la etapa III existe solo entre un 15% y un 20% de probabilidades de erradicar la patología completamente, mientras que en la IV el porcentaje es casi nulo.
Esta patología se divide en dos tipos principales, de células pequeñas y de células no pequeñas. El primero abarca solo un 15% de los casos a escala mundial, mientras que el de células no pequeñas representa el 85% restante.
Células pequeñas
Este tipo de cáncer de pulmón es de crecimiento rápido, se disemina con mucha más velocidad que el de células no pequeñas. Se clasifica en carcinoma de células pequeñas y carcinoma combinado de células pequeñas; siendo el primero el más detectado.
El 99% de los casos es producido por el tabaquismo, es decir que si un individuo que nunca ha fumado llega a padecer esta patología, en la mayoría de las veces se estará en presencia de un cáncer de pulmón de células no pequeñas.
Esta forma suele ser la más fuerte de ambos tipos, en general comienza en el área de los bronquios y en el centro del tórax.
Células no pequeñas
El cáncer pulmonar de células no pequeñas (CPCNP) es el más padecido y se clasifica en tres tipos principales:
•Adenocarcinomas que a menudo se encuentran en un área exterior del pulmón.
•Carcinomas de células escamosas que generalmente se ubican en el centro del pulmón al lado de un conducto de aire (bronquio).
•Carcinomas de células grandes que pueden ocurrir en cualquier parte del pulmón y que tienden a crecer y diseminarse más rápidamente que los otros dos tipos.
Posibles tratamientos
La esperanza de vida de los pacientes depende del estadio en el que se encuentra la enfermedad. En el estadio I las posibilidades de cura, acudiendo a la cirugía, oscilan entre 70% y 80%. A medida que avanza a los estadios II, III y IV, el promedio de curación va disminuyendo, señaló el doctor Alberto Chiapori.
Continuó explicando que en el estadio III el tratamiento suele ser una combinación de quimioterapia, radioterapia y cirugía, sin asegurar la cura de la persona, mientras que en el IV los tratamientos podrían prolongar la vida del paciente sin proveerle posibilidades de curación. Asimismo, destacó que “lamentablemente la mayoría de los casos son diagnosticados en los estadios IV y IIIB, puesto que esta enfermedad no presenta síntomas sino hasta que está muy avanzada”.
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