En los últimos días, varias han sido las denuncias formuladas por familiares de algunos pacientes que se encuentran recluidos en el servicio de Emergencia del Hospital Central Antonio María Pineda, sobre supuestos maltratos de los cuales son víctimas durante su estadía en el centro asistencial.
Las visitas supervisadas así como la permanencia en las áreas de observación del servicio para acompañar a sus familiares, ha sido motivo de descontento y rechazo por parte de los ciudadanos, quienes afirman que aparte de la incertidumbre de no saber nada de su paciente, deben gastar altas sumas de dinero en la compra de insumos que faltan en el dispensario y la realización de exámenes en centros privados.
Fanny Barcenas Álvarez, familiar de una paciente de la tercera edad que hace dos meses estuvo hospitalizada en la emergencia del Hcamp, denunció presunto maltrato verbal por parte de los funcionarios policiales, médicos y enfermeras que prestan servicio en este centro médico.
Aseguró que en el hospital no dejan a los familiares pasar a ver a sus familiares, y que hay escasez de solución, inyectadoras, gasas y otros insumos, mientras que la Sala de Espera Divina Pastora no funciona para estar atentos a las necesidades de sus familiares.
“Somos numerosas las víctimas del maltrato de los médicos y enfermeras de este hospital, pero muchas tienen miedo de hablar. Hemos denunciado en varias oportunidades y llevaremos esta situación a todas las instancias”.
“Aquí la gente pasa trabajo, tanto la familia como los pacientes. No les permiten a los familiares estar con los hospitalizados ni atenderlos como se debe. Las pantallas de la sala de espera no sirven y lo digo con propiedad. Mi mamá estuvo aquí y la mala atención nos hizo pasar malos ratos, no hay sensibilidad humana en este hospital”.
Foto: Daniel Arrieta