No quiero niños en la calle
que se encuentran solos y con frío
con el pensamiento puesto en el pan
el mendrugo de pan que le ofrece la mano
que se acerca pero no le da abrigo.
No quiero niños de la calle
yo los quiero unidos
unidos por la palabra y la acción
del que pueda ayudarles a encontrar su destino.
Dios bendiga a la Patria
a sus buenos hijos
a los que hacen la tecnología
a los que analizan el pensamiento
dándose cuenta que el mundo
tiene que ser mejor y siempre unidos,
unidos por el amor y la esperanza
de los biennacidos