Hermosa, radiante, como una diosa que ilumina siempre con su dulce sonrisa, así se mostró la querida actriz venezolana Ruddy Rodríguez en la inauguración de su centro de belleza en Sambil Caracas, Ruddy Rodríguez Spa, que abrió sus puertas hace unos días.
Un espacio moderno e innovador, que destaca por sus tratamientos faciales y corporales unisex, que van desde el láser, masajes, dermoabrasión e hidrataciones a base de chocolaterapia, oroterapia y polvo de perla, entre otras opciones.
Con equipos procedentes de Alemania, de última generación, en materia de láser para rejuvenecimiento, depilación definitiva y tratamientos antimanchas; además de ultracavitación y radiofrecuencia, bajo la batuta de un equipo de profesionales altamente capacitados dirigidos por Marguele Sanguino, fisioterapeuta especializada en estética y terapia manual.
Sembrando ideas
Las características de este centro estético lo hacen el primero de su estilo en el país, el cual ofrece un servicio VIP, con previas citas y reservaciones.
A lo que se suma el spa, peluquería, manicure y pedicure a precios completamente accesibles y con la calidad de la marca RuddyRodríguez como garantía.
-¿De dónde nació la idea de montar un spa?
-Surgió de la necesidad de redimensionar el negocio sobre la base de una propuesta innovadora. El spa bajo el modelo de inversionista y estilismo, y peluquería como franquicia. La idea es ‘sembrar’ este nuevo concepto a nivel nacional e internacional en un siguiente nivel.
-¿Qué novedad tiene su spa para diferenciarse del resto?
-Su diversificación de servicios VIP: el spa con sus bondades para la salud; junto al estilismo, peluquería, manicure y pedicure, todo integrado dentro de un nuevo concepto de negocio y a precios realmente competitivos.
-Se ha destacado por ser una mujer de belleza natural, que brilla por su nobleza interna, ¿cómo hacerle entender a las venezolanas que más que la apariencia física debe cultivar la parte espiritual?
-Pienso que de alguna manera eso está vinculado al crecimiento personal y la madurez del ser humano, porque no hay belleza externa, por muchos artificios a los cuales recurramos, sin crecimiento interior. Es un proceso que cada uno va descubriendo en su desarrollo emocional.
A veces, el entorno ejerce una gran presión social para transformar los verdaderos valores, pero hay que entender que cuando lo físico pasa, queda la solidez de lo interno y eso es imperecedero.
– ¿Cómo ser una mujer hermosa, sin convertirse en alguien frívolo?
-Reitero lo anterior. Si tomamos conciencia que la belleza exterior es solo un premio de la naturaleza a la que no tuvimos acceso por mérito, nos daremos cuenta de la importancia de desarrollar nuestras otras potencialidades, para dejar cosecha en nuestra vida.
Encaminar las inquietudes de ser útil a la colectividad y hacer uso del privilegio de la fama. Si pudiese definirse de esa manera, estaremos en el camino adecuado para evitar la frivolidad.
Mi labor en la Fundación Camino a la Felicidad me ha permitido centrarme en estas metas.
-¿Cuál ha sido el secreto para mantenerse radiante?
-Ser feliz, llevar una vida de equilibrio emocional y alguna ayudita externa… definitivamente.
-Con 20 años de carrera, no se detiene, sigue apostando a nuevos proyectos, ¿qué viene ahora?
-El día que los proyectos y los sueños se detengan, se detiene también la vida. Jamás debemos negarnos el derecho a alcanzar nuestros sueños y luchar por llevarlos a cabo. Sigo con el teatro, el cine, la televisión y expandiéndome como empresaria; todo eso es mi vida, amo lo que hago. Lo que viene es un continuo reinventarse.
-¿Cómo fue el 2012 para Ruddy Rodríguez?
-De muchas satisfacciones, en lo personal y en lo profesional, y lo cierro con broche de oro con la apertura de Ruddy Rodríguez Spa, Centro de Belleza.
-¿Que le pedirá al Niño Jesús?
-Paz para el mundo, y en particular para Venezuela, que se afiancen nuestros valores y nuestros principios morales y espirituales.
-¿Qué nos puede adelantar para el 2013?
-Seguiré adelante con los proyectos que me hagan crecer profesionalmente en cine y televisión, además de continuar desarrollándome como empresaria.
Foto: Cortesía de la actriz