Las calderas del Hospital Central Antonio María Pineda, que se encontraban dañadas desde hace ya varios meses y luego de realizar los trámites correspondientes por parte de la dirección del centro asistencial, el Ministerio de Salud se abocó a resolver esta deficiencia, que trajo como consecuencia la constante acumulación de desechos patológicos dentro del hospital.
El día de ayer, una comisión que fue enviada desde Caracas se encargaría de inspeccionar las calderas y conocer el estado real de las mismas, a fin de determinar los materiales necesarios para su reparación posterior, que se espera no pase de esta semana.
El Dr. Ruy Medina, director del Hospital, destacó que a través del Fundeeh se logró dar inicio a la reparación de esta máquina de vital importancia para el funcionamiento del Antonio María Pineda y era una responsabilidad del ente rector en la capital del país.
“Teníamos conocimiento de que unos ingenieros vendrían a revisar las calderas y comenzar las reparaciones. Lo que en realidad tiene es que necesita mantenimiento y cambio de las empacaduras, un procedimiento que debería hacerse de forma regular para que la máquina no se paralice”.
Indicó que es fundamental la supervisión y el mantenimiento de estos equipos para el funcionamiento óptimo del Hospital, así como las calderas, de las bombas de agua y esterilizadores centrales, que actualmente funcionan dos de siete equipos con los que cuenta este dispensario.
“Necesitamos que la salud realmente se descentralice, para que problemas como estos puedan ser solucionados sin tanta espera y burocracia, pues el Ministerio no se encarga sólo del Hospital de Barquisimeto, sino que tiene diferentes centros asistenciales que atender y no puede cubrir todos los espacios”.
Navidades tranquilas
Por otra parte, Medina destacó que hasta la fecha el movimiento en la Emergencia del Hcamp se ha mantenido tranquilo y sin colapsos, el personal se mantiene de guardia sobre todo los fines de semana dispuesto y preparado para atender cualquier tipo de contingencia.
“La emergencia está tranquila, al punto de que tenemos 10 camas desocupadas. Esperamos que no hayan hechos que lamentar y la gente tome conciencia y modere el consumo de bebidas alcohólicas”.
Sin embargo, destacó el registro del primer paciente adulto que ingresó a la emergencia con heridas causadas por fuegos artificiales, una práctica propia de las festividades decembrinas pero que ha dejado a su paso cientos de personas afectadas.
“Recibimos a la primera víctima de los fuegos artificiales, perdió tres dedos de la mano izquierda. Es importante que la gente entienda el cuidado que debe tener con estos artefactos explosivos, pues no son un juego”.
Foto: Ricardo Marapacuto
