En lo que va del 2012 en la entidad larense han secuestrado a 36 personas en el estado Lara, actualmente dos se encuentran en cautiverio, entre ellos un adolescente de 14 años.
Doce días lejos de su familia tiene un adolescente. Sus familiares se encuentran herméticos, pues temen por su vida, pero los seres queridos, conocidos y habitantes del municipio Jiménez de forma silenciosa han realizado entrega de panfletos, han rayado los carros y todo con el fin de suplicar a los captores que se apiaden y liberen al muchacho para que pueda pasar las navidades con los suyos.
Se lo llevaron en un carro verde
La víctima es un joven estudiante de tercer año que reside en el caserío San Antonio, del municipio Jiménez. Su padre, un comerciante que se dedica a la compra de hortalizas en Mercabar, para posteriormente venderlas.
No poseen grandes fortunas, pero aparentemente le comenzaron a hacer seguimiento y para sacarle dinero se llevaron al mayor de sus dos hijos.
El 5 de diciembre aproximadamente a las 7 de la mañana el adolescente salió de su casa, con la finalidad de dirigirse al liceo en la población de Cuara. Tenía por costumbre irse a pie, y ese día el jovencito estaba en compañía de otros seis compañeros.
Justo en el puente que está en la vía hacia Cuara, se dice que a dos kilómetros y medio de la residencia del muchacho, de forma brusca se detuvo un vehículo verde oliva, un Chevrolet Nova, en el cual se trasladaban tres sujetos armados. Al menos dos se bajaron e interceptaron al grupo de liceístas, pero tenían su objetivo claro: iban por el hijo del comerciante de apellido Fréitez y así lo hicieron. Se lo llevaron con rumbo desconocido.
Los captores no se comunicaron de forma inmediata, según comentó un allegado a la familia; lo hicieron después y allí les expresaron que se trataba de un secuestro y le estaban pidiendo una alta suma de dinero para su liberación.
Son doce días que tiene el adolescente separado de su familia.
El pueblo callado
El caserío donde vive la víctima está conmocionado. Es la primera vez que pasa algo así por esa zona, aunque indicaron que todos los moradores de la población son comerciantes y ninguno es adinerado. Sienten un gran temor porque les suceda algo igual.
En el lugar se respiraba temor, angustia. Al ver que llevaban vehículos extraños a la zona, todos cerraban las puertas de sus hogares y escondían a los niños que estaban asomados. A quienes se le preguntaba por el adolescente indican que estaban preocupados y que son sus padres quienes deben hablar.
La puerta de la vivienda del joven la abrió una dama que al preguntarle si era la mamá del adolescente sonrió, pero consultó con un grupo de hombres que estaban reunidos en el frente de la morada y expresaron que no darían información alguna. Lo único que manifestaron es que el niño no sufría de nada.
Aunque los allegados indicaron que muchas veces tenía problemas “con su estómago y con el azúcar”.
Aún cautivo
Hasta ahora se desconoce si las autoridades están manejando este plagio, porque no se ha dicho nada al respecto. Sin embargo se estima que al tener conocimiento del mismo comenzarán a hacerlo.
Con este secuestro son 36 los cometidos en Lara y dos personas las que actualmente se encuentran en cautiverio.
Ismael Yánez Vásquez, de 76 años de edad, fue plagiado el viernes 30 de noviembre, cumpliendo el día de hoy dieciséis días en manos de sus captores.
Fotos: Elías Rodríguez