En horas de la mañana de ayer, aún mantenían un fuerte hermetismo ante los medios de comunicación los familiares de los tres jóvenes cuyos cuerpos sin vida fueron hallados el pasado jueves en Guacabra, en el kilómetro 9 de la carretera vieja hacia Caseteja.
Sólo uno de los parientes accedió a declarar, siempre y cuando se le garantizara el anonimato, pues un hijo suyo, afirmó, había sido trasladado a los calabozos de los tribunales en el Edificio Nacional por su presunta relación con este caso de triple homicidio.
Según explicó, la mañana del pasado miércoles efectivos del Cicpc habrían allanado su vivienda, llevándose detenidos a su hijo e hija, bajo supuesta posesión de drogas. «La madre del muchacho que mataron, con quien estoy emparentada, también fue privada de libertad por el cuerpo de investigación, y luego fue liberada el mismo miércoles a las 2:00 de la tarde. Los efectivos le dijeron que le entregarían a su hijo muerto, pues ella no lo veía desde las 4:00 de la tarde del día anterior», afirmó.
“A todos los detenidos los han sembrado. Los cuerpos policiales les hicieron una patraña”, acotó.
Expresó que el cuerpo de seguridad asesinó a tres seres humanos de manera ilógica, aunque admitió que les constaba que los tres jóvenes tenían entradas por delitos.
“Esa no era la manera de tratar con ellos. Quienes los asesinaron no pensaron en el dolor que causarían a sus madres. Era preferible que los hubieran puesto presos, al menos así ellas podrían seguir viéndolos”, comentó.
Por otra parte, confirmó que estaría aguardando por el pronunciamiento de los tribunales, pues además de sus hijos, quienes son primos de uno de los ultimados, también fueron detenidos un amigo y una amiga de los tres jóvenes aparentemente ajusticiados.
“Me parece muy sospechoso que el Cicpc haya hecho allanamientos desde el miércoles por la mañana y que, poco después, el jueves, aparecieran asesinados los tres muchachos”, acotó.
Asimismo, aseguró que los tres muchachos eran amigos cercanos que siempre andaban juntos, a la vez que indicó que se había enterado del hecho tras recibir una llamada telefónica de una sobrina.
“Fue entonces cuando acudí a la morgue del Hospital Central junto a la mamá del muchacho, quien sorprendida, descubrió que uno de los abatidos era su hijo”, dijo.
“Esperaremos a que pasen los interrogatorios por parte de los tribunales, pues los jóvenes que mantienen presos, no sabían que sus primos y amigos habían sido asesinados cuando fueron detenidos por el Cicpc”, expresó.
Cabe recordar que los tres jóvenes hallados muertos, con múltiples impactos de bala en sus cabezas, las manos atadas detrás de la espalda y sus rostros cubiertos, ya fueron plenamente identificados por sus familiares como Luis Manuel Escalona (20), José Daniel Arráez Pérez (18), y un menor de sólo 15 años de edad, todos ellos residentes de diferentes sectores del municipio Palavecino.
Durante el día de ayer no se produjo ningún pronunciamiento por parte de las autoridades en torno al caso, por lo que aún se presume un ajusticiamiento como el posible móvil detrás del triple homicidio.
Foto: Elías Rodríguez